Si bien desde el BCRA aclararon una y otra vez que no tienen ningún objetivo con respecto al tipo de cambio, la fuerte devaluación que sufrió el peso en las últimas semanas podría generar un traspaso a precios que se vería en las próximas semanas.
A pesar de la racha alcista del dólar y de los malos datos preliminares de inflación para julio, en las mesas de operaciones esperan que el Banco Central (BCRA) mantenga hoy inalterada su tasa de referencia correspondiente al centro del corredor de pases.
La autoridad monetaria utiliza dicha tasa para manejar las expectativas y para tratar de ubicar la inflación dentro de su meta para este año (entre 12 y 17%). Ayer, la consultora Elypsis (una de las que sigue el BCRA) dio a conocer su proyección de inflación para julio y sostuvo que el IPC nacional se ubicaría en 2,1%, con bastante influencia del aumento de los combustibles. Para la zona metropolitana, en tanto, la estimación es de 2,2%.
«Estamos esperando que mantenga la tasa. Sin embargo, hay dos cuestiones que podrían llevar al BCRA a efectuar una nueva suba, de entre 75 y 150 puntos básicos. Por un lado, todavía hay muchos pesos en la calle, como consecuencia de las últimas dos licitaciones de Lebac. Por otro, salió una estimación de inflación muy alta para julio», sostuvieron en un banco de capitales internacionales.
Si bien desde el BCRA aclararon una y otra vez que no tienen ningún objetivo con respecto al tipo de cambio, la fuerte devaluación que sufrió el peso en las últimas semanas podría generar un traspaso (pass-through) a precios que se vería en las próximas semanas (efecto de segunda ronda). Sin embargo, los operadores descartan que el organismo haga operaciones monetarias para contener al dólar. Belisario Álvarez de Toledo, portfolio manager de Consultatio Assett Management, sostuvo:
«Yo creo que el BCRA no tiene como objetivo controlar al dólar con la tasa de referencia, ya que el tipo de cambio sube por una cuestión política. Esperamos que mantenga la tasa del centro del corredor de pases. Tampoco lo vemos subiendo las tasas en el mercado secundario de Lebac, de hecho, estuvo vendiendo las Letras que vencen entre septiembre y abril a prácticamente los mismos valores a los que salieron en la licitación primaria».
La última vez que el BCRA subió su tasa de referencia fue el 11 de abril por los malos datos de inflación de ese mes. Desde ese momento, el centro del corredor de pases se mantiene en 26,25%. En una conferencia de prensa que brindó la semana pasada, el presidente de la autoridad monetaria, Federico Sturzenegger, afirmó están tratando de bajar la inflación núcleo. Sobre ese punto, Diego Chameides, estratega de mercado de la Gerencia de Research de Banco Galicia, comentó: «La inflación núcleo se sigue manteniendo en niveles demasiado elevados, que complican el cumplimiento de la meta prevista para este año. Por lo tanto, no esperamos un cambio en la tasa de política monetaria».
Los operadores entienden que no sería conveniente que el BCRA moviera la tasa 20 días antes de las PASO. En cambio, consideran que el organismo podría empezar con los recortes a partir de septiembre. «Si los datos de inflación de septiembre y octubre son buenos, podría empezar un ciclo de baja de tasas pero con mucha cautela y reducciones muy marginales. Creo que a fin de año la tasa podría llegar a un piso de 23%», dijeron en una entidad bancaria. Álvarez de Toledo coincidió: «Después de julio, la inflación volvería a desacelerarse y el BCRA podría empezar a acomodar las tasas. Luego de las PASO podría esperarse una baja».