Tras dos primeros meses de blanqueo poco alentadores y superado el efecto de las ventas de la ANSeS para contener al contado con liquidación. Ganó 90 centavos a pesar de los controles. Lo estiman cerca de $ 11,5 para el cierre de este año
El dólar informal volvió a las andadas. En agosto ganó más de 10,5% y anotó su segundo mayor avance mensual del año, tras los flojos dos primeros meses del blanqueo y la mayor incertidumbre cambiaria que generó el fallo negativo en le Corte de Apelaciones de Nueva York por el juicio con los holdouts. El viernes, en un “feriado cambiario” blue, las pocas operaciones que se concretaron se hicieron a $ 9,50 por unidad, 90 centavos por encima de su cierre de julio.
La estacionalidad pudo más que los controles. La segunda mitad del año –tras el cierre de las paritarias, el pago de medio aguinaldo y la aceleración de la emisión monetaria– es alcista para el blue.
La mirada atenta del secretario de Comercio, Guillermo Moreno, logró interrumpir todo lo posible las operaciones mayoristas en el mercado informal mientras las tenencias de bonos de la ANSeS hacían rulos de ida y vuelta con las mesas de otros bancos públicos para planchar el dólar “contado con liqui”.
Ese cocktail, más una suba de tasas que mantiene a los plazos fijos, fueron suficientes para hacer bajar, primero, y atenuar, luego, la remontada blue.
En mayo, el paralelo cayó 6,9% y, al mes siguiente, 8,3%. En julio, momento de gran demanda minorista causada por el turismo invernal, el blue volvió a las subas y trepó más de 6%.
Pero recién en el mes que terminó el sábado pasado, las subas del informal recuperaron el impulso que supieron tener a principios de este año.
Los Cedines del blanqueo todavía no aparecieron y facilitaron las subas. Hasta el viernes, se blanquearon u$s 51.240.000 a través de 1.498 cedines, de los cuales ya se cobraron
$ 19.070.000. Ninguno, hasta ahora, llegó al mercado secundario.
“En realidad, agosto pareció el mes más normal dados los fundamentos de la economía. Hoy la Argentina financia su déficit con pesos y sus pagos de deuda con reserva: eso claramente se refleja en la cotización del tipo de cambio”, dijo Maximiliano Castillo, director de ACM. “Lo raro, si querés, fueron los meses previos de baja, el aumento de la brecha es lo esperable”, concluyó.
Sólo la semana pasada, el blue ganó 32 centavos, tras el fallo negativo en las cortes neoyorquinas y la respuesta argentina, con la reapertura del canje.
En agosto, la brecha que separa al oficial del paralelo pasó del 56% al 68%, y eso a pesar de que el dólar oficial cerró el mes a $ 5,68 tras anotarse su mayor subida mensual (3%) desde marzo de 2009.
La suba del blue durante el mes pasado incluso superó a la del bono soberano en dólares con mejor desempaño: el Bonar 2013 que vence el 12 de este mes y que ganó 9,9% en el período.
Según analistas, si la emisión de pesos se mantiene al ritmo vigente, al tiempo que el BCRA sigue perdiendo respaldo de reservas, las subas del blue sólo pueden continuar. “Semejante cantidad de pesos durante los últimos meses del año tendrá su correlato en el mercado informal de cambios. En este sentido, y dada la efectividad que viene mostrando el ratio de convertibilidad para anticipar al contado con liquidación, mantenemos nuestras expectativas de un dólar paralelo en torno a $ 11,5 para fin de este año y comienzos del próximo”, analizó un informe de Delphos Investment.