• EL PRESUPUESTO PRESENTADO AYER PROYECTA UN CRECIMIENTO DEL 6,2% PARA 2014 QUE HABILITARÍA UN NUEVO PAGO DEL TÍTULO
El Cupón PBI, una idea que diseñó en 2005 el entonces ministro de Economía, Roberto Lavagna, junto a su secretario de financiamiento, Guillermo Nielsen, obligará al Gobierno a desembolsar otros u$s 11.500 millones en los próximos dos años y redondeará con eso un costo total de u$s 20.000 millones a lo largo de los tres mandatos del kirchnerismo.
El Gobierno confirmó ayer que el país deberá prepararse para afrontar un nuevo pago de ese instrumento financiero a fines de 2014 y de 2015, al sugerir en el Presupuesto que tiene previsto crecer un 6,2% el año próximo. Una actividad en estos niveles, de cumplirse, gatillará para el Tesoro nacional la obligación de desembolsar unos u$s 7.125 millones a los tenedores de las unidades vinculadas al PBI; de los cuales se estima que u$s 5.700 millones deberán materializarse en moneda extranjera porque corresponden a títulos que están nominados en dólares y euros. El monto se suma a los u$s 4.400 millones que ya deberá hacer el Gobierno a fin de 2014 por el crecimiento de este año que, según sus mediciones, será superior al 3,26% que establece el prospecto. El monto total para estos dos años asciende así a los u$s 11.500 millones, de los cuales u$s 9.200 millones deberán concretarse en moneda extranjera.
El pago deberá hacerse en un contexto en el que la Argentina sufre los efectos de la escasez de divisas. Y en un escenario en el que se espera que continúe la caída de reservas del Banco Central. Para este año, las consultoras ya están estimando que el organismo oficial habrá perdido unos u$s 8.500 millones. Si el año próximo se repite esta misma performance, quedarán en las reservas sólo u$s 25.000 millones.
Hay elementos que parecen, incluso, bastante más dramáticos. En la consultora Analytica estiman que existe una elasticidad de 3 a 1 en las importaciones respecto del nivel de actividad. Lo que indica que, por cada punto que crece la economía argentina, las compras al exterior suben otros tres. "Si el crecimiento estimado es del 6%, significa que las importaciones deberían crecer más del 15%. Lo cual supone una fuerte salida de dólares del país", aclaró a este diario el economista jefe de esa consultora, Rodrigo Álvarez.
El Cupón PBI fue incluido en el prospecto de oferta del canje de deuda para tentar a los acreedores con la idea de que recuperarían en 12 años la quita nominal del capital. De acuerdo con sus condiciones de emisión, el requisito para que se habilite su pago es que el PBI aumente por encima del crecimiento proyectado del escenario base, definido en la oferta de canje original, y que se ubique por encima de ese valor ($ 287.012 millones, base 1993).
En Econométrica, la consultora de Mario Brodersohn, consideraron que de continuar los pagos con este mismo ritmo ya en 2017 el país se liberaría de la deuda porque se activaría una cláusula que se estableció en el prospecto: los desembolsos acumulados de estos títulos no pueden superar la quita de capital nominal obtenida en la reestructuración de la deuda (unos u$s 36.000 a u$s 40.000 millones de dólares, según distintas estimaciones).
El camino recorrido ya se empieza a acercar a esa cifra. Desde el primer pago hasta el que se hará en diciembre de 2015, lo desembolsado habrá acumulado los u$s 20.165 millones. Equivale, precisamente, al 60% de las reservas que hasta ahora tiene el Banco Central.
Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=706763