El economista Andrés Asiain opinó que debería encarecerse el llamado dólar turista y desdoblar el circuito de compra y venta de divisas.
El gobierno nacional debería quitarle el velo de ilegalidad al mercado paralelo del dólar secundario y aumentar el recargo a las compras con tarjetas de crédito en el exterior, para evitar que los argentinos "gasten dólares haciendo turismo" en el extranjero, recomendó el economista Andrés Asiain.
Profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) e integrante de la Cátedra Nacional de Economía Arturo Jauretche, Asiain se mostró partidario de subir el llamado "dólar tarjeta", en momentos en los que la administración nacional precisa divisas para "sostener la actividad y el empleo", y evitar que el crecimiento del país se vea limitado.
El docente de la Universidad de Buenos Aires consideró que "no debería ser ilegal el mercado paralelo", al tiempo que destacó la necesidad de que la Argentina avance hacia una etapa "superior" del crecimiento económico: "La del desarrollo", impulsando "cambios estructurales" en su andamiaje productivo.
Asiain se expresó en estos términos en momentos en los que algunos trascendidos señalan que el gobierno estaría estudiando la posibilidad de desdoblar el mercado de cambios e incrementar, después de las elecciones legislativas del mes que viene, el recargo del 20 por ciento aplicado a las compras con tarjetas de crédito en el exterior.
"No debería ser ilegal el mercado paralelo, debería haber en todo caso un mercado libre donde se compren y vendan dólares a precio no oficial, o sea que el Banco Central no suministre los dólares ahí, pero el que quiera comprarlos a ocho o a nueve, que los compre y que no tenga que estar cometiendo un acto ilegal", opinó.
Opinó que "el gobierno debería tener ciertos mecanismos de intervención para administrar un dólar financiero y de especulación".
Sin crisis. Por su parte, el economista del Plan Fénix Antonio Müller consideró que "no están dadas las condiciones" para tener una visión catastrófica de la situación económica, afirmó que el nivel de competitividad es "bueno" y rechazó la necesidad de una devaluación para mejorarla.
Müller rechazó las predicciones de posibles crisis macroeconómicas y bombas de tiempo en la economía, formulada por economistas opositores al gobierno. "No soy aficionado a las predicciones, pero no hay razones importantes como para tomar una medida contractiva para parar una crisis", dijo.
Consideró que "el tema deuda puede interferir en la medida que no haya posibilidades de renovar vencimientos de capital, aunque el nivel de deuda pública y externa es muy bajo".
El pensamiento hegemónico
La ministra de Economía bonaerense, Silvina Batakis, aseguró que la economía en la Argentina abandonó el “pensamiento hegemónico” de otras épocas y se puso “al servicio de la sociedad”. La funcionaria destacó que, durante los últimos diez años, “la economía en la Argentina dejó atrás el pensamiento hegemónico desconectado de la realidad para volver a estar al servicio de la sociedad”.