Por TSA Bursátil
Ayer, y como última medida a fines de capear el temporal, el Gobierno Nacional decidió re entablar comunicaciones con el FMI a fines de asegurar la liquidez necesaria para, en palabras de los impulsores, poder asegurar la continuidad de un modelo económico gradualista. Más allá de las consideraciones individuales, es importante poder comentar lo que ha pasado estos últimos 20/25 días, lo que se está decidiendo hacer y sus principales implicancias en los distintos instrumentos.
Que pasó en Argentina y en el mundo estos últimos 20 días
Lo que ha venido pasando lo podemos enumerar, muchas cosas se dieron para este momento que estamos atravesando:
- Fortalecimiento Americano y dos consecuencias directas:
o Suba de la tasa de referencia de los instrumentos a 10 años. La tasa de interés oscilando en el 3% para los bonos Americanos significó para los instrumentos nacionales la necesidad de brindar un incremento de tasas y mantener la competitividad por diferencia. Dado que el prospecto de un título no puede modificarse, esto llevo a que los mismos presenten una baja de cotización (para rendir más, a misma forma de pago, la variable de ajuste es el precio).
o Apreciación del dólar con respecto a todas las monedas. Esto tuvo alcance mundial, todas las monedas se depreciaron frente a la moneda americana. En distintos ritmos y con diferentes valores pero repercutió en todas las economías. Por errores de timing o por debilidad estructural golpeo más fuerte en el ánimo nacional.
- Señales dispares y momento de debilidad en el gobierno nacional:
o Los principales motores que determinan el humor de la opinión pública siguen siendo la gran cuenta pendiente, la inflación y el consumo son las patas flojas de la estructura gubernamental y en los últimos días se han hecho sentir. La meta oficial del 15% para la inflación 2018 es realmente utópica en estos momentos, y que desde los ministerios la sostengan obedece únicamente a brindar señales de estabilidad y posicionamiento. Para peor, la devaluación no hace otra cosa que incrementar las expectativas de aumentos de precios para los próximos meses.
o Desde el lado parlamentario, la oposición parece haber encontrado en el tratamiento de tarifas un punto desde donde empezar a crecer. La concentración de las subas pautadas para el 2018 en estos primeros meses ha llevado a plantear un nuevo escenario de tarifazos y rápidamente se tomó crédito político. Hoy se está debatiendo hacia dónde va ese proyecto, que de prosperar tendrá todavía que pasar por Senado, y luego el Ejecutivo ya anticipó que vetará la ley.
o Y finalmente, desde las noticias que generan impacto negativo, entro en vigencia la ley que graba la renta financiera de los inversores extranjeros.
o En esta disparidad, encontramos que los motores macroeconómicos siguen firmes. Se descuenta crecimiento del PBI por segundo año consecutivo, en valores cercanos al 2%; la industria se muestra aún solida, la pobreza viene mostrando continuos descensos y la actividad laboral mejoras mes a mes. Como venimos diciendo, datos importantísimos para creer en una mejora sostenida, pero que aun lejos esta de volcar al consumidor final (la economía familiar).
o La gran noticia, y muy esperada, se dio este miércoles 09 de mayo, finalmente y tras varios intentos se aprobó la Ley De Financiamiento Productivo que termina de sentar las bases para el desarrollo del Mercado de Capitales, para facilitar el acceso de PyMES a la financiación y para securitizar instrumentos hipotecarios. Rápidamente el mercado de renta variable tomó muy bien la noticia y tras reiteradas bajas mostró una suba de más del 6% a media rueda.
Entonces, y resumiendo, un cambio de humor en la opinión pública traducida en pérdida de confianza, una salida masiva de capitales extranjeros productos de una tributación que no estaba en los planes y un contexto internacional desfavorable primaron sobre indicadores macroeconómicos sólidos y llevaron a turbulencias en los mercados cambiarios.
Como actuó el gobierno y el BCRA ante esto
Si algo quedará de esta crisis o turbulencia vivida fue la falta de firmeza y de anticipación para poder matizarla y pasarla sin mayores inconvenientes. De hecho, primaron las decisiones en sentido opuesto y eso solo aumentó la intranquilidad en los inversores y mercados.
Y en ese accionar poco claro cada una de las decisiones se convirtió en insuficientes. Lo primero que se intentó fue frenar la primera apreciación americana interviniendo fuerte en los mercados cambiarios. A los pocos días el BCRA prefirió dejar flotar el dólar e intentó controlarlo vía tasa de interés. Así las ruedas se fueron acumulando con volatilidad y sin la sensación de que el problema de fondo estaba resuelto.
Ni la última medida del viernes pasado 04 de mayo, en la cual se subió la tasa de política monetaria por encima del 40% anual y se llevó a una reducción del patrimonio de los bancos en moneda extranjera fue suficiente.
El mercado continuo leyendo inestabilidad y, así en el día de ayer, el mismo Presidente de la Nación declaró que se habían restablecido comunicaciones con el FMI a fines de encontrar alguna línea preventiva que asegure pasar esta situación sin mayores inconvenientes.
El resultado, por lo menos hasta ahora, parece haber sido la vuelta a la tranquilidad de los mercados en general (impulsado también por la aprobación parlamentaria de la ley de mercados) pero el costo político, y el descontento de muchos aliados de la coalición partidaria, que conlleva la decisión aun es difícil de medir.
A hoy, esa decisión de solicitar asistencia del FMI solo significa eso. No tenemos mayores detalles técnicos del alcance, o siquiera del monto. Trascendió que la suma podría ser de hasta uss 30.000 millones y dentro de los tipos de asistencia encuadrados dentro de la línea PLL (Precautionary and Liquidity Line) que brinda precaución de liquidez.
Quedan por conocerse los alcances de la misma, y si bien se presume una tasa mucho más baja que cualquier asistencia internacional (rondaría el 3,5/4%) en el contrapunto definir los requerimientos para la obtención de la ayuda es el mayor interrogante.
Como influyó todo esto en los distintos instrumentos y que perspectiva vemos hacia adelante
Activos de Renta Fija en Pesos: La suba de las tasas de política monetaria fue el gran disparador para las nuevas inversiones en pesos, y se espera para la próxima licitación de LEBACS del miércoles 16/05 tasas que alcancen, por lo menos, el 38% anualizado.
Los perjudicados, los inversores que por distintas razones tuvieron que desarmar el portafolio antes del vencimiento de la letra, compraron rendimientos por debajo del 26/27% y al vender con tasas de mercado por encima del 35% vieron menguar su capital inicial.
Activos de Renta Fija en Dólares: Acotamos acá al análisis de LETES, los inversores que estaban comprados vieron acrecentarse su posición de acuerdo a la devaluación. Entendiendo este instrumento como una operación de asegurar un dólar a un tipo de cambio determinado en el futuro podemos decir que no tuvieron modificaciones en el objetivo de su inversión. Igual situación vivieron aquellos inversores que tenían títulos en dólares comprados como inversión a finish con precio y TIR predeterminada en el momento de la compra, nada modificó su situación.
Títulos Públicos, en Pesos y Dólares: La incertidumbre política económica y la consecuente suba del riesgo país y la suba de tasa americana han golpeado fuertemente estos instrumentos, llevándolos a perdidas de precio de hasta un 8/10% en el periodo.
Acciones: Sin duda los instrumentos más golpeados, el cambio de realidad, el sincerar los inconvenientes que está atravesando el país y las dudas internacionales han hecho caer a los activos de renta variable nacionales por debajo de los valores de principio de año. La incertidumbre se pago en estos activos, la bolsa argentina se encuentra hoy entre las más baratas de la región y un poco de tranquilidad (y un re ajuste como emergente como el MSCI) rápidamente la harán retomar un canal alcista.
Nuestras Recomendaciones
Destacamos una vez más la importancia del papel que juega el perfil de cada inversor para entender los instrumentos en los que se invierte y las variaciones que puede tener cada uno.
Más allá de esto, y como mencionamos desde el comienzo mismo, podemos establecer algunos cursos de acción dependiendo de las sensaciones de cada inversor y la realidad que este atravesando.
Para los inversores más tradicionales y conservadores, que tengan preocupación por la depreciación de la moneda o bien por las turbulencias que estamos viviendo las LETES pueden ser la mejor decisión. Cobertura contra variación del tipo de cambio y un pequeño rendimiento adicional.
En un segundo estadio, creemos conveniente, para los inversores que no poseen riesgo de moneda asociado participar en la próxima licitación de LEBACS. El BCRA la llevará adelante el próximo martes 15/05 y con plazos hasta 150 días se esperan que los rendimientos más cortos (35 días) se coloquen por encima del 38% anual, disminuyendo hasta 34/35% para los más largos.
Para el resto de las posiciones, siempre es importante comunicarse con su asesor/analista comercial para determinar los caminos a seguir. Será una herramienta fundamental para acompañarlos en decisiones fundamentadas en momentos de alta volatilidad.