Muchos rescataron a un valor inferior al de compra. Pero cuando la calma volvió, el valor de las cuotapartes se restableció. Los clientes que se quedaron, no perdieron
Si bien en los últimos 12 meses la industria de fondos comunes creció 33% en pesos, en los últimos 55 días vio una disminución de más de $ 50.000 millones. Al 21 de mayo, el sector administra unos $ 635.000 millones.
«Si desagreguemos lo sucedido en el último mes, podemos observar algunas curiosidades. En primer lugar, la industria generó más de $ 38.000 millones para los inversores, convirtiendo el rendimiento de mercado en un aliciente para los activos bajo administración. Sin embargo, en esta oportunidad el foco debe ponerse en los capitales retirados de la industria que llegaron a $ 90.000 millones», apuntan desde Criteria.
Haciendo un foco en los rescates, los analistas resaltan que «tanto inversores institucionales y minoristas optaron por retirar sus capitales. Los primeros rescataron más de $ 58.000 millones, mientras que el segmento minorista, retiró más de $ 31.000 millones. Estos rescates no fueron independientes de la moneda y la clase de activo. Se diferenciaron los fondos liquidez en dólares. Estos instrumentos no tienen riesgo de depreciación de la moneda local, ni de plazos (duration), siendo los más seguros que ofrece la industria. Todos los restantes sufrieron rescates».
Gustavo Cañonero, Head Strategist y Partner de SBS, sostiene que «los fuertes retiros de la industria de fondos hasta cierto punto reflejaron la gran volatilidad observada en el mercado de activos, y más específicamente la falta de liquidez que se vivió durante esos días. Los fondos tienen garantizada su liquidez aunque los activos subyacentes no hayan tenido mercado y eso hizo que se convirtieran en víctimas de su propio éxito y bondad. Contenida la volatilidad, pero más importante, resuelta la falta de liquidez con la ayuda del Banco Central, vimos una rápida estabilización en los fondos comunes».
Por su parte, Daniel Vicien, Director Comercial de Fondos Comunes de Inversión de Balanz, agrega que la volatilidad cambiaria impactó sobre el valor de las Lebac y por efecto derrame sobre el valor de las cuotapartes de los fondos compuestos por este instrumento. «En gran medida, aquellos inversores que manejan su liquidez a través de estos fondos retiraron sus tenencias pese a valor inferior al de compra. Cuando la calma volvió al mercado, el valor de las cuotapartes se restableció, y hoy estos fondos proyectan un rendimiento de más del 38 % anual, con lo cual los clientes que permanecieron invertidos no perdieron». Mirando el mercado en su totalidad, Vicien resalta que se pudo observar que los bancos perdieron participación en la industria por el retiro de fondos de los clientes minoristas en este contexto ante la falta de asesoramiento.
Alejandro Kowalczuk, Head Portfolio Manager de Argenfunds, señala que en el caso particular de Argenfunds, la volatilidad de mercado, la suba en el tipo de cambio y la suba de tasas a nivel local y en EE.UU., no afectó de manera significativa el patrimonio total administrado, al menos medido contra pesos.
«Esta estabilidad patrimonial se debe principalmente a tres factores: a la baja incidencia de las personas físicas dentro de nuestra cartera de clientes; una cartera de inversores calificados bien atomizada, conformada por corporativos e institucionales de mediano y gran tamaño y el crecimiento en la participación de fondos en dólares en nuestra cartera. Podemos ver entonces que nuestro patrimonio administrado al 25/04 era de $ 7.000 millones y al 22/05 $ 6.900 millones, no acusando prácticamente impacto».
Además, el Head Portfolio Manager de Argenfunds destaca que «la participación de los fondos en dólares pasó de un 18% en octubre del año pasado a un 23% en la actualidad, en parte explicado por la licuación por la suba del dólar, pero también por nuestra recomendación de transitar el 2018 con un sesgo de posicionamiento de cartera en dólares».