Importadores dividen en muchas compras pequeñas sus operaciones cambiarias para esquivar el control del BCRA. La entidad se valió de regulaciones informales para frenar esas compras hormiga e interrumpir así 20 ruedas consecutivas en las que debió vender divisas y que le costaron u$s 1.550 millones de sus reservas
El Banco Central frenó todas las operaciones cambiarias de más de u$s 200.000 y menos de u$s 300.000 para cortar con una racha de 20 ruedas consecutivas de ventas en los que tuvo que desprenderse de u$s 1.550 millones de sus reservas. El parate dictado por la entidad conducida por Mercedes Marcó del Pont derrumbó el volumen operado en la plaza cambiaria mayorista e hizo que el dólar saltara 1,3 centavo hasta $ 5,907 por unidad, en lo que fue su mayor suba diaria de todo el mes.
El BCRA había tenido que vender u$s 180 millones en los primeros dos días de la semana para proveer un mercado en el que no abunda la oferta y había acumulado 20 ruedas consecutivas en las que su intervención en el mercado cambiario arrojó un saldo vendedor.
La última vez que tuvo un rol comprador fue el 30 de septiembre pasado, cuando adquirió u$s 28 millones en el mercado cambiario.
Desde entonces, vendió en todas las ruedas de este mes y se deshizo de u$s 1.550 millones en el período.
Las ventas de octubre superan en u$s 400 millones las de septiembre y lo transforman así en el peor mes para el BCRA desde octubre de 2011, cuando se instauró el cepo cambiario.
Ayer, la mesa de operaciones del Central tuvo que recurrir a regulaciones informales para entorpecer las operaciones en la plaza cambiaria.
La entidad exige a los bancos que compran para terceros –generalmente importadores que deben pagar embarques ya aprobados por la AFIP y Comercio– informar con anticipación (de unos 10 días) cualquier operación mayor a u$s 300.000 dólares. En base a esa información, la mesa del BCRA después programa cuándo y cómo podrá cursar cada banco esas compras.
El resultado de esta norma no escrita, que surgió en diciembre de 2011 durante los primeros meses del cepo y que hasta junio de este año afectaba a compras por encima de los u$s 500.000, es que en el mercado se dispararon las operaciones por u$s 290.000.
“Aparentemente, el Banco Central sospecha que las operaciones están siendo segmentadas para pasar debajo del radar”, contaron desde un banco.
Los importadores, con ayuda de las entidades financieras, hacen cinco operaciones de u$s 250.000 en lugar de una de u$s 1,25 millón para evitarse demoras y revisiones.
“Hoy lo que hizo fue concentrarse sobre las operaciones de entre u$s 200 y u$s 300 millones. Pidió que se informaran todas y las revisó una por una”, contó un corredor cambiario. “Se tomó su tiempo para evaluarlas, algunas pocas las autorizó, pero las que no llegó a autorizar se quedaron afuera de la rueda.
Los renovados controles pincharon al mercado, pero no al precio.
Ayer se operaron u$s 132 millones en el Siopel y u$s 60 millones en el MEC. El promedio de octubre para el Siopel es de u$s 210 millones al día, u$s 80 millones por encima de lo que se transó ayer.
Por el lado del precio, el mayorista trepó 1,3 centavo, su mayor suba del mes para un sólo día de operaciones.