La decisión apunta a contener la salida de dólares. Es en promedio y durante el primer trimestre, pero en algunos casos la escala llega a 27,5% y se extiende seis meses
En busca de evitar que sigan saliendo dólares de la Argentina la administración nacional impuesto un nuevo tope a la importación.
Ayer, la ministra de Industria, Débora Giorgi, y el secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, se reunieron con ejecutivos de las cámaras que agrupan a productores de equipos electrónicos y de oficina y a fabricantes e importadores de automotores. Los funcionarios les comunicaron un nuevo esquema para 2014. Durante el primer y segundo trimestre deberán implementar un plan de disminución de utilización de divisas de, en promedio, 20 por ciento.
Por el lado de los empresarios participaron la Asociación de Fábricas Argentinas de Terminales de Electrónica (Afarte), de la Cámara Argentina de Maquinas de Oficina, Comerciales y Afines (Camoca), de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) y de la Cámara de Importadores y Distribuidores Oficiales de Automotores (Cidoa). Cada uno a su turno fue recibiendo la noticia.
“A los importadores los mató”, reconoció en off the récord un hombre de la industria automotriz. “Ya tenían un cupo y la obligatoriedad de compensar cada dólar de importación con un dólar de exportación, luego llegó el impuesto a los bienes de lujo que ayer tuvo dictamen de comisión en el Senado, y ahora tienen que reducir hasta 27,5% las importaciones de unidades”.
Aunque el promedio de reducción es de 20% la escala llega hasta casi 28% en el caso de las marcas que tengan la balanza más descompensada.
Las compañías automotrices que tengan un balance positivo o neutro “podrán mantener sus volúmenes de importación, en tanto que, en el otro extremo, las que más aportan al déficit sectorial deberán efectuar una disminución de 27,5%”, destacó el comunicado oficial.
En su gran mayoría se encuentran más cerca del tope máximo que de poder esquivar esta restricción.
Aunque es muy difícil dimensionar en cuántas unidades menos se verá afectada la oferta de automóviles durante 2014, un dato que refleja el impacto que puede tener es el de patentamiento del último mes. De los 60.609 automóviles nuevos que se vendieron durante noviembre, 54.539 (61%) fueron fabricados en otros países.
Frente a la consulta de si esta restricción también afectaría a las unidades Mercosur la respuesta fue tajante: “es para todos los importados”.
Todos los empresarios salieron del encuentro con Giorgi y Costa con rostros de preocupación. Los equipos de trabajo están programando 2014 y esto cambia la ecuación.
Pero quienes salieron totalmente desanimados fueron los importadores aglutinados en Cidoa a quienes les aclararon que la presión será mayor.
“El pedido era reducir 20% las importaciones del primer trimestre contra igual período de 2013, salvo para nosotros que nos aclararon que lo debemos realizar durante el primer semestre de 2014”.
Algunos empresarios un poco más positivos entienden que esa reducción en las importaciones se las impondrá naturalmente el impuesto que a los autos que está por aprobar el Senado.
A la hora de explicar la medida la ministra Giorgi “recordó los avances de sustitución de importaciones” y dijo que “con el objetivo de consolidar los planes de administración de comercio, es importante lograr una reducción de piezas importadas y mantener los puestos de trabajo”.
Por su parte, Costa sostuvo que “el mantenimiento de la administración de comercio y la consistencia de las cuentas externas” son puntos centrales de las políticas de industrialización y de sustitución de impor taciones del gobierno nacional.