Los ahorristas prefirieron captar las altas tasas, que se incrementaron a partir de la competencia que generaron los plazos fijos para no clientes. Es un incremento real de 9,5% respecto a junio de 2018
En un escenario de calma cambiaria, durante junio los plazos jos en pesos explicaron el leve crecimiento que evidenciaron los depósitos al sector privado. Estos arrojaron un promedio para todo junio de $2.269 millones, mientras que el mes anterior habían cerrado con un promedio de $2.201 millones. Esto implica un incremento de 3,07%.
En términos nominales, los plazos fijos tradicionales no vinculados a UVA, treparon en junio un 71% respecto a lo que se había registrado en el mismo mes del año pasado, en plena crisis cambiaria. Así promediaron los $1.186.663 millones, versus unos $693.654 que habían visto 12 meses atrás.
Si se mira la evolución mensual de esta inversión típica de los ahorristas minoristas, el incremento es de 3,17% en términos nominales respecto al mes anterior. Esto está aún por encima de la inflación esperada para este junio. Si bien aún no se conoce el dato oficial del INDEC, el cálculo que hace el mercado es que rondará los 2,6%.
Los depósitos a plazo tuvieron una evolución opuesta a otros depósitos en pesos. Por ejemplo, los saldos en cuenta corriente se incrementaron en junio 3,4% en forma intermensual y un 36% si se lo compara con lo que se había registrado un año atrás. En términos reales, la caída de las cuentas corrientes alcanzó el 12,64%.
En tanto, los saldos en cajas de ahorro avanzaron 4,6% en junio respecto al mes anterior. Si se compara este stock en términos interanuales, representan una suba de 30%; lo que descontando la inflación da una caída real de 17,04%.
«La variación en términos reales de los depósitos respecto al mes pasado fue del 0,36%, con una variación positiva de sus tres principales componentes, hecho que no sucedía desde diciembre del 2018», explicaron desde la consultora ACM. Si bien las tasas en pesos bajaron en junio, el spread entre la tasa que paga el Banco Central por las Leliqs y la que le pagan los bancos a los ahorristas volvió a achicarse, en torno a 4 puntos porcentuales.
«Hay dos claves que explican la evolución positiva de los plazos fijos. Por un lado, la medida del BCRA para generar plazos fijos para no clientes, que ayudó mucho a equipararlas tasas», explicó Augusto Quiñones, analista de First.»Por otro lado, el tipo de cambio planchado hizo que más ahorristas busquen capitalizarlas altas tasas en pesos», añadió.
Si se mira la evolución de estos depósitos banco por banco, se ve que los más beneficiados fueron los que salieron a captar plazos fijos para no clientes, con una tasa más atractiva. Los bancos privados que se mantuvieron al margen de esta operatoria, no registraron aumentos significativos de sus depósitos a plazo.
El Banco Provincia, por ejemplo, captó $ 1800 millones extras durante junio, explicaron fuentes de la entidad. «El fondeo de junio se obtuvo con tasas que fueron del 51,3% para mayoristas y 46,9% para los minoristas, 1 punto por debajo del promedio del sistema. Es decir que Banco Provincia creció en captación a un menor costo», dijeron. Por su parte, en el Banco Provincia, el incremento mes con mes de este tipo de depósitos fue cercano al 20%. En tanto, en el Hipotecario, otra de las entidades que salió a captar depósitos de no clientes, armaron «Si bien no notamos cambios significativos, pudimos ver un leve crecimiento respecto de meses anteriores».