Los especialistas coincidieron en que las letras de liquidez del Banco Central se deben desarmar, pero aunque el monto es considerado alto y un problema, la devaluación moderó su gravedad.
El stock de Leliq está en la mira de los economistas. Según un informe del Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano, «la montaña de Leliq representa un 79% de la base monetaria», y aseguraron que «así como ocurrió con las Lebac, en algún momento se deberá desarmar».
Tanto desde Research for Trades, Eco Go y Econviews coincidieron en que se trata de un problema a resolver, pero los economistas no le otorgan el mismo grado de gravedad.
«El Banco Central debe fijar una tasa de interés suficientemente atractiva para asegurarla renovación de los vencimientos diarios; la cuestión de fondo es que la entidad carece de ingresos genuinos para hacer frente al pago de los intereses que genera ese stock», dijo Víctor Beker, director del CENE. El economista agregó que «los intereses se financian colocando más Leliq; su stock crece como una bola de nieve».
En la misma línea, Gustavo Neffa, socio y director de Research for Traders, señaló: «El BCRA necesita dinero exógeno, del Tesoro, o bien del FMI, o de un paquete de ayuda, ya que el mercado de deuda voluntaria internacional está cerrado para Argentina». Recordó, además que, como el instrumento es para los bancos y las letras están calzadas con plazos fijos, por lo que la «gran duda es si los plazos siguen sin renovarse y van a dólar, de ser así, las entidades invertirán menos en Leliq y el problema del BCRA será emitir o encontrar otras maneras para seguir con la absorción de pesos».
Para Federico Furiase, el problema es la película: «Si el BCRA sigue vendiendo reservas y tiene que subir la tasa de sus pasivos remunerados, su balance se seguirá deteriorando y eso le puede meter presión al tipo de cambio. Por otro lado, indicó que «el riesgo Leliq está asociado a la dinámica de los depósitos a plazo fijo», y que si hay dolarización de depósitos los bancos no van a tener liquidez suficiente para ir a Leliqs, entonces el BCRA tendrá que expandir por desarme de Leliq generando presión cambiaria e inflacionaria».
Eric Ritondale, director de Econviews, rescató que las Leliq «son unos $ 18.000 millones, un 5 % del PBI, mientras que las Lebac, en su momento, representaban el 10%», de manera que hoy son «la mitad del problema que eran las Lebac» hace poco más de un año. «Para que las Leliq no se conviertan en problema lo que hace falta es que vuelva la confianza en los activos locales, no solo en la moneda, sino en los bonos, en toda la deuda pública. Las Leliq son, en realidad, la consecuencia de un problema mayor, que es la falta de confianza», comentó.
No obstante, el salto del tipo de cambio mejoró la situación. «Como el Banco Central tiene activos en dólares y pasivos en pesos, la devaluación le mejora la solvencia», remarcó Neffa.