Esa cifra incluye lo declarado ante la AFIP y lo que está “en negro”. El monto equivale al 85% del PBI local.
Los dólares y euros, que los argentinos tienen «bajo el colchón», en cajas de seguridad o en depósitos o inversiones financieras en el exterior -como bonos y acciones- siguen en aumento. Suman US$ 304.597 millones, según datos del INDEC del segundo trimestre de 2019.
Son activos de argentinos o empresas argentinas, que pueden estar o no declarados ante la AFIP, pero que permanecen fuera del sistema local. Ese monto está en permanente ascenso. En 2009 esos fondos sumaban U$S 146.323 millones. A fines de 2015 subieron a U$S 222.465 millones. Ahora llegaron al récord de U$S 304.597 millones.
Esta mayor tenencia de activos externos es anterior al fuerte retiro de depósitos en moneda extranjera que se produjo luego de las elecciones de las PASO. Y se explica por el aumento de la dolarización y de la salida de capitales que hubo, en especial, durante el año pasado y en lo que va de 2019 –récord en la formación de activos externos-, como informa todos los meses el Banco Central.
Una contrapartida de esta salida de capitales fue el aumento del endeudamiento externo.
En total los activos externos del país suman U$S 384.605 millones. Al 30 de junio U$S 64.278 millones (17%) estaban en las reservas del Banco Central. Otro 2% en los bancos comerciales, 3% en la Tesorería del Gobierno general y el 79% en «otros sectores, principalmente sociedades no financieras y hogares”. Esto representan los U$S 304.097 millones.
Por el fuerte retiro de dólares por parte de los depositantes, esta cifra se incrementó durante agosto y septiembre en detrimento de las tenencias de los bancos y del Banco Central.
El aumento de los activos de los argentinos fuera del sistema y del país, como explicó Clarin en varias oportunidades, no se modificó por el blanqueo de capitales de US$ 116.800 millones. Es que con el blanqueo ingresó solo una parte del efectivo que estaba «bajo el colchón» y de las tenencias en el exterior. El grueso –en torno del 80%-no fue repatriado y quedó en los bancos y entidades financieras del exterior. Incluso funcionarios del Gobierno admitieron que de sus activos declarados buena parte sigue afuera.