Las cuentas públicas mostraron superávit primario de $ 798,5 millones, ayudadas por aportes de la ANSeS. poco usuales en un primer mes. El gasto público creció 44%
El Gobierno debió apelar a casi $ 2.950 millones de la ANSeS para mantener el superávit primario en enero, pero no pudo evitar que la devaluación casi duplicara el déficit financiero. Así se desprende de las cuentas públicas que el Ministerio de Economía difundió ayer.
Enero cerró con un superávit primario de $ 798,5 millones, 2,1% inferior al saldo de hace un año. Se trató del regreso a los números positivos luego de un trimestre en rojo. Pero para lograr esa novedad, que había prometido el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, usó Rentas de la Propiedad de la ANSeS por $ 2.942,7 millones. El superávit de enero de 2013, de $ 815,7 millones, se había alcanzado sin apelar a recursos extraordinarios del organismo o el BCRA.
El déficit financiero, posterior al pago de vencimientos de deuda, casi se duplicó. Los $ 3.052,1 millones representaron un 92,9% de incremento sobre el rojo de hace un año, de $ 1.582,5 millones. El servicio de la deuda creció 60,6%, hasta los $ 3.850,6 millones, por la devaluación del tipo de cambio del último año y, en particular, por el salto que dio la divisa en la última semana de enero: en doce meses, la depreciación del tipo de cambio minorista fue del 58,5%.
En el mes en el que venció el Bonar 14, la factura por los títulos en moneda extranjera en un año pasó de $ 147 millones a casi $ 1200 millones.
Los gastos se movieron en línea con los ingresos tributarios. El gasto primario subió 44,2% interanual, por incrementos en los gastos corrientes (46,2%, a $ 68.050,4 millones) y de capital (35,5%, a $8.329,3 millones).
La recaudación tributaria, en tanto, se incrementó 42,2% en enero, hasta los $ 40.019,6 millones. A esa cifra se sumaron las contribuciones de la Seguridad Social, que treparon un 32,3% interanual a $ 28.239,9 millones. Los ingresos corrientes en enero totalizaron $ 73.326,7 millones.
Los gastos corrientes pegaron un salto luego de meses estacionados alrededor del 30%. Las remuneraciones crecieron 34% en enero y las transferencias al sector privado (subsidios a empresas y personas y planes sociales) se expandieron 73%, hasta los $ 15.934,4 millones.
Los gastos de capital, en tanto, siguieron con la tendencia de 2013, año electoral. “Respecto al gasto, el mes de enero siguió evidenciando las prioridades en materia de inversión social e infraestructura por parte del Gobierno Nacional”, destacó el Ministerio de Economía de Axel Kicillof en un comunicado..
“El gasto es muy alto, pero a priori no me parece que se pueda proyectar a lo que queda del año”, dijo Marina Dal Poggetto, economista del Estudio Bein. En su opinión, el aumento en las jubilaciones, del 11% hasta septiembre, cierta contención en las paritarias y la cada vez más cercana quita de subsidios a las tarifas de servicios públicos moderarán las erogaciones. “Proyectamos un aumento más parecido al 30, 31% (para 2014), que al 43 por ciento”, agregó. En 2013, el gasto subió 33%.
Las cuentas públicas tuvieron en 2013 el peor resultado de toda la década kirchnerista. El déficit financiero alcanzó los $ 64.477,5 millones y se incrementó un 16% anual, a la vez que el resultado primario fue deficitario en $ 22.479 millones con un incremento del 414% respecto a 2012. Parte del ordenamiento de variables al que apuesta Kicillof (que evita la palabra “ajuste”) pasa por acomodar las cuentas del Estado.