Con la llegada de marzo se ponen más rígidas las normas de liquidez mínima que impone el BCRA. Los bancos acercaron menos ofertas a las Lebac y subieron la tasa de call hasta el 30%. La autoridad monetaria inyectó $ 540 millones ayer tras 8 semanas consecutivas de esterilización que retiraron $ 40.000 millones
El Banco Central (BCRA) inyectó $ 540 millones en su licitación semanal de letras y notas con las que regula la masa monetaria. La leve expansión monetaria, prácticamente nula, es la primera del año luego de 8 semanas consecutivas de esterilización que retiraron más de $ 40.000 millones de la plaza. En los bancos explican que, estacionalmente, el inicio de marzo dificulta la esterilización.
La “aspiradora de pesos” con la que el titular del BCRA, Juan Carlos Fábrega, buscó reducir la cantidad de pesos en circulación para intentar así contener a los precios y a las cotizaciones paralelas del dólar ayer se tomó descanso.
Las normas de liquidez mínima que impone la autoridad monetaria a los bancos permite que las entidades calculen el promedio de sus tenencias en forma trimestral entre diciembre y febrero. Durante los otros nueve meses del año los bancos tienen que alcanzar el promedio de liquidez que establece la normativa en forma mensual, es decir, necesitan conservas más dinero contante y sonante.
El fin de la laxitud de la normativa de liquidez mínima suele causar subas de tasas –ayer, la tasa de call a un día cayó al 26% después de volar hasta 30% la semana pasada– como resultado de la repentina escasez de pesos.
Esa menor liquidez estacional se sintió en la licitación de Lebac y Nobac de ayer. Los bancos acercaron ofertas por $ 3.384 millones, algo más de la mitad de lo que ofrecieron una semana atrás, que no alcanzaron para cubrir la totalidad de los vencimientos que enfrentaba el BCRA ayer.
Las tasas, sin cambios, fueron desde el 28,7% que paga la Lebac a 84 días hasta el 30,31% que rinde la de 371 días. Los rendimientos de las letras están casi 13 puntos porcentuales por encima del nivel al que alcanzaron el año, ya que la entidad conducida por Fábrega los elevó para atraer pesos ociosos de los bancos, restar circulante de la plaza y elevar las tasas de interés (la Badlar subió casi 7 puntos porcentuales hasta el 26% como resultado de esa decisión).
“En los últimos días los bancos tuvimos que quemar números para adaptarnos a esta parte del año, cuando la liquidez se calcula mensualmente”, dijeron en la mesa de un banco privado. “A partir de ahora el sistema va a funcionar de acuerdo con su verdadera liquidez, y la Badlar va a tender a acercarse al 28% que marca la Lebac”, agregó.