En diciembre un empleado necesitaba 15 salarios para comprar un auto de gama media. Hoy necesita 19. Lo mismo pasa con las propiedades. Advierten por un enfriamiento del consumo.
La reciente devaluación del 24% en el primer bimestre del año dejó en evidencia la pérdida del poder adquisitivo de los consumidores. Ese impacto en el bolsillo se siente, sin demasiada perspicacia, en la cuenta del supermercado pero también en la adquisición de otros bienes aspiracionales como la casa o el auto. Hoy, para comprar un vehículo de gama media, un empleado registrado necesita 18,9 sueldos, mientras que -en diciembre del 2013- necesitaba 15. Con el mismo salario, ese trabajador hoy accede a la compra de 58,2% del metro cuadrado de un departamento a estrenar en Capital Federal. En tanto, hasta hace poco más de dos meses, podía comprar más del 70% de esa unidad de medida. Y, en 2012, el 73%.
Los cálculos corresponden a la consultora abeceb.com y marcan, en ambos ejemplos, la brusca caída de la capacidad de compra.
En el caso del automóvil, se tomó el precio de un vehículo de gama media, de $ 188,9 mil, en base a datos de ACARA, la cámara que agrupa a los concesionarios. También un salario bruto promedio de $ 9.960, según el INDEC.
“La mejora del poder adquisitivo del salario en vehículos venía impulsando las ventas en los últimos años pero en 2014 vemos que va a sufrir el primer retroceso de la década”, señala Soledad Pérez Duhalde, economista de la consultora. “De todas maneras, se mantendría en niveles razonables”, advierte, al proyectar que en diciembre de este año, se necesitarán 17,7 salarios para lograr el objetivo de las cuatro ruedas.
En el cálculo de la vivienda, la consultora tomó el precio de un departamento a estrenar en Capital Federal (exceptuando Puerto Madero), a razón de unos US$ 2.000 el metro cuadrado, versus un salario -en moneda extranjera- de 1.326. “En ambos casos, se ve la pérdida del poder de compra de los salarios en dólares”, concluye.
Se trata, en definitiva, de que el salario empieza a actualizarse por detrás de ciertas variables como la inflación y el precio del dólar.
Según la consultora Economía & Regiones, “en diciembre de 2013, el salario en dólares mostró una caída del 3% aproximadamente. Y se estima que el shock recesivo de la devaluación, lo habría hecho caer en un 12% y un 20% en enero y febrero respectivamente, que lo dejaría en niveles de abril de 2011”, señaló en su último informe (ver más ‘Tras la devaluación…’).
Entornadas las puertas del consumo debido a la caída del poder adquisitivo, lo que viene -en el corto plazo- es una mayor propensión de la gente a ahorrar, agrega el economista de la Fundación Mercado, Oscar Liberman. “A diferencia de lo que ocurre en otras sociedades, los argentinos ahorran cuando empiezan a transitar una situación mala, porque actúan por expectativas. Por eso, con la limitaciones que hay para acceder a una casa, un auto o un electrodoméstico, por la falta de financiación, es probable que en los próximos tres meses haya un mayor porcentaje de familias ahorrando”, dice el analista.
Desde la consultora CDI que lleva -desde hace varios años- un indicador que mide el nivel de Esfuerzo de Acceso a la Vivienda también surge la necesidad de destinar más ingreso a la compra de una propiedad, respecto del año pasado.
Este índice combina tres elementos para medir el “esfuerzo”: el precio de un departamento de 3 ambientes en Capital Federal, el salario promedio de un trabajador en blanco y la evolución del crédito hipotecario.
“Tomando el dólar oficial, hoy se necesitan 8,78 sueldos para comprar un metro cuadrado, mientras que, en octubre del 2013 se necesitaban 7,44”, dice Juan Carlos Franceschini, director de CDI. “En cambio, si tenemos en cuenta el dólar inmobiliario, aproximadamente un 15% por debajo del dólar blue- serían necesarios 10,51 ingresos para completar el valor del m2”. Comparado con el período de la convertibilidad, el aumento es del 114%, señaló. “Y, si incorporamos en el análisis las condiciones del crédito Procrear, para el que se necesitar contar con el terreno, el nivel de esfuerzo se equipara con el promedio alcanzado en los años de convertibilidad”, agregó.
Fuente: http://www.clarin.com/politica/Hacen-sueldos-comprar-autos-casas_0_1098490173.html
