Como un calco de lo sucedido en el segundo semestre de 2013, los bancos continúan liderando las subas del mercado local en el primer cuatrimestre de 2014. Los inversores distinguen poco y nada entre las entidades líderes que cotizan en el mercado local: dos de los principales papeles del sector acumulan incrementos superiores al 50% (Macro y Francés), mientras que el Galicia crece levemente por debajo, pero igual un impresionante 48%.
Luego de la corrección que sufrió en general el mercado porteño en enero, y particularmente los bancos, a partir de febrero comenzó una recuperación que prácticamente se mantiene sin interrupciones hasta ahora. Los papeles locales ni siquiera fueron afectados por las tomas de ganancias que se produjeron en Wall Street y otros países desarrollados, aunque ahora ya recuperaron casi todo lo que habían caído a principios de abril.
El aumento de las acciones bancarias se vuelve más impresionante si se lo compara con la evolución del dólar en el mercado local. El "blue" subió apenas el 5% en lo que va de 2014, aunque el dólar oficial trepó bastante más por la devaluación de enero, que lo llevó desde un arranque de $ 6,50 al iniciarse el año a $ 8, nivel que mantiene hasta ahora. Pero aun con este incremento cercano al 22%, el aumento de las acciones bancarias resulta significativo. El índice Merval, que promedia el comportamiento de las acciones líderes, subió el 25% en lo que va del año, superando levemente al dólar oficial, pero la mitad de lo que aumentaron las bancarias.
Sólo un papel le ganó con amplitud a los bancos, tal como sucedió en el balance de 2013: Edenor, ante la apuesta del mercado por un reacomodamiento tarifario, pero sobre todo por los valores casi de liquidación a los que había llegado el papel. Tras subir más del 200% el año pasado, ahora acumula el 106% en el primer cuatrimestre, o sea más que duplicó su valor (tanto en pesos como en dólares).
No hay demasiados misterios detrás de la apreciación de las acciones bancarias y en buena parte se repiten los argumentos que circulaban el año pasado:
• Se trata de papeles con mucha liquidez, por lo que resulta muy sencillo entrar y salir para cualquier inversor, especialmente los extranjeros. Además, hay variedad para elegir, lo que no sucede con casi ningún otro sector de las empresas que cotizan en Bolsa.
• Los resultados del sector financiero han sido positivos en los últimos años, por más que en las entidades se quejen de que el aumento del patrimonio neto se ubica por debajo de la inflación acumulada en los últimos años. La devaluación de enero también tendrá un impacto contable positivo por la tenencia de carteras en dólares (el Central obligó a vender buena parte de esa posición recién a principios de febrero).
Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=738113