Es por el atraso cambiario y el menor crecimiento de las reservas. Los activos dolarizados estaban baratos: la brecha se redujo a la mitad entre el blue y el fuga
El contado con liquidación (CCL) tuvo ayer su mayor suba diaria (36 centavos) en una semana en la que el mercado comenzó nuevamente a dolarizar sus carteras para cubrirse de un nuevo movimiento del tipo de cambio, ya que el efecto de la devaluación de enero se licuó con la inflación, las reservas crecieron menos de los previsto en plena liquidación de divisas agrícolas y la expansión monetaria para financiar al fisco se vislumbra importante.
En el mercado atribuyeron a la demanda de diferentes compradores (desde cerealeras hasta hedge funds) las adquisiciones de bonos en dólares contra pesos haciendo subir el CCL hasta $ 10,76, el dólar MEP a $11,2, los títulos en dólares más de 3% y el Merval más de 4%.
La más plausible es el excedente de pesos que empresas medianas y grandes alcanzaron tras liquidar los impuestos anuales, que destinaron a activos en dólares que estaban muy baratos considerando las perspectivas económicas.
“Las empresas cerraron balance, y vieron la posición neta de caja que les quedó después de pagar sus impuestos y el desarbitraje entre el dólar paralelo y el cable, y se volcaron al MEP y al CCL. Ven un escenario de tasas que han bajado y no les resulta atractivo quedarse en pesos”, contó un operador que pidió no ser mencionado.
De hecho, la brecha cambiaria entre el blue ($ 11,30) y el CCL cayó a la mitad en la última semana, a 54 centavos, y con el MEP quedaron casi a la par.
La dolarización de carteras comenzó antes de que el Banco Central (BCRA) iniciara microdevaluaciones la semana pasada, con la compra de dollar-linked. Pero, rápidamente, en pocos días, todos los valores de dólar se acomodaron por medio de la demanda adicional de títulos dollar-linked más que nada corporativos, bonos en dólares (el Bonar X subió 3,52% ayer; el Boden 15, 3,44%, y el Bonar 24, 3,81%) y las acciones que permiten dolarizarse mediante CCL (Tenaris subió 0,99% en el exterior, pero 5,25% en la plaza local. E YPF, 0,88% y 5,2%).
La suba del CCL fue tal ayer que algunos operadores esperaban que Anses volviera a intervenir para bajar las cotizaciones y quedaron con posiciones vendidas para evitar daños, tal como sucedía antes de la devaluación de enero.
Es la economía
El mercado esperaba que el primer semestre fuera más tranquilo en términos monetarios, pero el nivel de reservas que no repunta, los siete meses por delante sin liquidaciones significativas de divisas, la inflación que atrasa el tipo de cambio y el déficit fiscal que necesitará financiarse con más emisión monetaria cambiaron las expectativas.
“Los diferentes tipos de dólar estaban adormecidos por la forma en que el gobierno intervino y el golpe de la devaluación. La combinación que el dólar tardó en acomodarse a la inflación y que el BCRA no compró tantas reservas, tarde o temprano iba a llevar a esto. Se espera ahora que el Central empiece a mover el tipo de cambio para que no pierda espacio respecto de la inflación”, dijeron en un banco internacional.
En el mercado también afectaron las rispideces entre el presidente del BCRA, Juan Carlos Fábrega, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, sobre la política económica.
Sin embargo, en el sistema financiero definen como “saludable” una devaluación para atraer divisas mediante la colocación de títulos en el exterior. Coinciden que bajaría la tasa que pagarían el país por la nueva deuda si los compradores (hoy muy interesados) pudieran entrar las divisas al país a un tipo de cambio mayor a 8 pesos.