El Central volvió a autorizar más pagos para sorpresa del mercado. Los operadores creen que las compras que pudo hacer el organismo posibilitaron la liberación. Sin embargo las reservas crecieron solo u$s 325 millones en el mes. Aunque las arcas cederán por el pago del Club de París, la City confía en los beneficios a largo plazo
Una mayor libertad para pagar importación sorprendió a los operadores de cambios. A una semana de que el Banco Central (BCRA) incrementara los límites a los pagos, ayer el organismo volvió a conceder más autorizaciones, sin que esto afectara el precio del dólar mayorista, que se mantuvo casi sin cambios en $ 8,075.
La flexibilización del Central se dio en un contexto de mejores expectativas, de la mano del acuerdo con el Club de París.
En las mesas de dinero consideraron que, con el cierre del mes tan cerca, el BCRA ya logró su objetivo de mayo y por eso habilitó más compras. Gracias a que se ?pisaron? las importaciones, el ente monetario compró u$s 610 en las últimas ruedas, un total que incluye la adquisición de u$s 70 millones de ayer. Pero la satisfacción es agridulce, las reservas tan solo crecieron en ese período de u$s 28.348 millones a u$s 28.545, 197 millones, o la tercera parte. Y si se compara el nivel de las arcas en abril, la diferencia es abismal: el mes pasado se sumaron u$s 1.213 millones mientras que en mayo acumula u$s 325 millones. Si bien el Central compró alrededor del doble en cada mes, los compromisos de energía impidieron un refuerzo más importante de divisas.
En cuanto al escenario a futuro, la llegada del invierno implicará un mayor gasto en energía y además hay que agregar el desembolso de los u$s 650 millones recientemente acordados con el Club de París.
De todas formas, en la City prefieren apuntar al largo plazo. En Orlando Ferreres, el economista Jefe Fausto Spotorno destacó que los u$s 650 millones representan un monto insignificante para las reservas, y que lo que en realidad hay que mirar son otras variables ?más complicadas?, como la balanza comercial.
En tanto, en Econviews enfatizaron sobre los beneficios que traerán la financiación en el mercado internacional. El economista Eric Ritondale explicó que si bien el pago de este año y el de u$s 500 millones del año que viene se harán con reservas, será más lo que ganará el país con la posibilidad que tendrán las empresas y provincias de emitir bonos. ?Es más lo que se gana que lo que se pierde en el largo plazo?, agregó.
?El acuerdo con el Club de París es una sorpresa positiva, tanto para el crédito como para las reservas; podría destrabar el acceso a crédito, tanto público como privado?, dicen desde Elypsis. Sin embargo, el economista Jefe, Luciano Cohan, advirtió que ?la posibilidad de acceder a mayor financiamiento externo reduce la urgencia por balancear la cuenta corriente, por lo que es más probable que el gobierno avance nuevamente hacia un ancla cambiaria?.