Analistas calculan que los acuerdos con el Club de París, Repsol y el Ciadi cargarán con fuertes vencimientos al próximo Gobierno. Confían en que habrá financiamiento externo
Los recientes acuerdos con empresas y el Club de París reconfiguraron el perfil de vencimientos de deuda para los próximos años de manera tal que, durante el próximo período presidencial, habrá que cumplir con vencimientos equivalentes a las reservas con las que cuenta el Banco Central (BCRA) en estos momentos. Las tenencias de la entidad conducida por Juan Carlos Fábrega quedaron en u$s 28.831 millones, una cifra en la que están prácticamente estancadas desde fines de abril.
La Argentina arregló varias disputas con cinco empresas en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) a fines del año pasado, llegó a un acuerdo con Repsol por la expropiación del 51% de YPF y pactó con el Club de París la regularización de sus deudas. Los arreglos, bien vistos por analistas e inversores que los entienden como una normalización, aumentaron los vencimientos futuros de deuda en forma considerable que sin un cambio en el flujo de divisas serán difíciles de administrar.
“Los vencimientos en moneda extranjera con privados y el Club de París se habrían duplicado para el año 2016 y se habrían multiplicado 2,5 veces entre el 2018 y el 2021 como consecuencia de las nuevas obligaciones contraídas”, consignó un informe de Delphos Investment que lleva las firmas de Martín Benegas Lynch y Leonardo Chialva.
“Sin embargo, los años más complicados continuarían siendo el 2015 y el 2017, donde, según nuestras estimaciones, vencerían u$s 9.498 millones y u$s 10.000 millones entre capital e intereses”, agregó el informe.
Los cálculos de Delphos parten de datos oficiales de septiembre del año pasado, actualizados en base a estimaciones. Más allá de ese margen de error que admiten en el propio reporte, el aumento en los perfiles de vencimientos en los años inmediatamente posteriores al final de este período presidencial es considerable.
Cálculos de Bein & Asociados dan resultados similares, aunque abarcan un período más largo. El aumento en el monto de vencimientos derivado del reconocimiento de estas deudas asciende a u$s 2.800 millones antes del fin de este mandato presidencial, mientras que el flujo adicional de pagos entre 2016 y 2024 se ubica en u$s 17.300 millones.
Benegas Lynch y Chialva van un paso más allá y a los nuevos vencimientos suman los que ya estaban programados desde antes del giro ortodoxo del Gobierno: “Entre 2015 y 2018 se deberán afrontar vencimientos en dólares con el sector privado y el Club de París que equivalen a la totalidad de las reservas internacionales en poder del BCRA en la actualidad”.
La clave para que la suba en el perfil de vencimientos sea administrable, coinciden los especialistas, está en el flujo de ingreso de capitales que –sostienen– debería resultar de la normalización de las deudas.
“El perfil de vencimientos hacia adelante luce sumamente manejable, sobre todo considerando un contexto de apertura al crédito donde, en un escenario de mínima, el país lograría refinanciar sus vencimientos de capital tal cual realiza la gran mayoría de las economías integradas”, sostuvo el informe de Bein.