Frente a este escenario de «pax cambiaria», la opinión de los especialistas se divide entre quienes prevén que la calma se extenderá por mucho tiempo, y que todavía se pueden aprovechar rendimientos en pesos, y entre quienes afirman que es un buen momento para buscar cobertura contra eventuales saltos del dólar.
Luego de alcanzar picos históricos a mediados de octubre de 2020, las cotizaciones no oficiales del tipo de cambio descendieron abruptamente y desde que comenzó el nuevo año se mantuvieron relativamente estabilizadas bajo la cotidiana intervención de organismos públicos. Frente a este escenario de «pax cambiaria», la opinión de los especialistas se divide entre quienes prevén que la calma se extenderá por mucho tiempo, y que todavía se pueden aprovechar rendimientos en pesos, y entre quienes afirman que es un buen momento para buscar cobertura contra eventuales saltos del dólar.
Durante estos últimos meses, muchos inversores obtuvieron importantes ganancias a partir de depositar sus pesos en títulos que ofrecieron elevados retornos, como los que brindaron aquellos que ajustan por CER. Algunos analistas siguen recomendando apostar por estos bonos, teniendo en cuenta que la inflación se aceleró más de lo esperado en marzo, que se prevén aumentos superiores al 2% mensual de acá a fin de año y que los rendimientos reales de la curva son positivos a partir de 2022.
Además, con este escenario, buena parte del mercado estima que el dólar oficial seguirá planchado por varios meses, por lo menos hasta las elecciones de octubre, ya que el Gobierno parece decidido a utilizar el tipo de cambio como principal ancla inflacionaria. “Hoy no hay nada mejor que CER, al menos mientras tengamos esta súper soja de más de u$s500”, aseveró Leonardo Chialva, analista de Delphos Investment, quien remarcó la poca demanda que vienen exhibiendo los «dollar linked».
Sin embargo, otros especialistas sostienen que hay cierto agotamiento de los bonos en pesos y que esta calma cambiaria puede ser un buen momento para buscar cobertura contra un posible salto de las cotizaciones. La percepción de que los dólares paralelos están baratos se sustenta, por ejemplo, que el MEP está a casi $20 del solidario ($143 vs $162).
Esta “pax cambiaria” viene siendo sostenida por un Banco Central que desde diciembre de 2020 pudo comprar más de u$s3.500 millones en el mercado de cambios. Simultáneamente, la autoridad monetaria utilizó parte de esas divisas para mantener la paridad de los bonos que vendió con el objetivo de bajar las cotizaciones de los dólares financieros.
Para abril y mayo se prevé que la entidad conducida por Miguel Pesce seguirá acumulando dólares en sus arcas debido a la temporada de cosecha de soja y maíz. Sin embargo, se estiman presiones para cuando el ingreso de divisas por estos cultivos merme a partir de junio.
“Esta semana que pasó encendió más de una luz amarilla con un alto dato de inflación y una floja licitación del tesoro que por segunda vez consecutiva no alcanzó a cubrir vencimientos, por lo cual deberá recurrir a la emisión monetaria con alta probabilidad. Esto alimenta las presiones devaluatorias ya sea en el tipo de cambio oficial como en el financiero”, dijo a Ámbito Federico Broggi, Gerente de Research en Invertir en Bolsa (IEB).
En ese sentido, desde IEB vienen sugiriendo desde hace unas semanas “no enamorarse del ‘carry trade’” y tomar algo de cobertura ya sea a través de bonos “dollar linked” como de Cedears, que son certificados de acciones extranjeras que cotizan en la plaza local.
En cuanto a los “dollar linked”, los inversores tienen la posibilidad de acudir al TV22, que vence en abril de 2022 y podría captar una posible depreciación del tipo de cambio oficial a fin de año. Actualmente dicho título ofrece una tasa de rendimiento implícita del 1,7%.
Por su parte, los Cedears tienen la ventaja de que ofrecen cobertura, vía precio, contra variaciones del CCL. Bajo ese atractivo, en los últimos días estos instrumentos vienen concentrando cerca del 70% de las operaciones en el mercado de renta variable.
“Recomendamos mantener una posición a largo plazo proponiendo inversiones en instrumentos muy atractivos que hay en el mundo como Cedears ligados a nuevas tecnologías como 5G, el gran avance del ecommerce, la biotecnología y la inteligencia artificial como para nombrar algunos ejemplos. Nos inclinamos por Nvidia, Taiwan Semiconductors y Square y Shopify” sostuvo Diego Demarchi, gerente de wealth management de Balanz.
Aparte de los Cedears, Demarchi sugirió invertir en Fondos Comunes de Inversión (FCI) y ETF. Entre los FCI resaltó el fondo Neuberger Berman 5G Connectivity Fund, el Schroders Global Energy Transition para quienes quieran invertir en energías limpias y cuidado del medio ambiente, el Neuberger Berman Global Thematic Equity Fund y dos fondos orientados a la recuperación asiática como Schroders Grater China y New Capital Asia Future Leaders.
Mientras tanto, entre los ETF, Balanz advierte valor en los fondos ARK de Cathie Woods, iShares PHLX Semiconductor y los clásicos SPY (S&P) y QQQ (Nasdaq). Los ETF son una especie de “mix” entre los FCI, ya que diversifican la cartera en un solo instrumento, y las acciones, debido a que se operan en el mercado secundario. Tienen como objetivo replicar el rendimiento de otro activo -o una canasta de activos- como puede ser un índice, un sector o subsector específico, commodities, moneda, países o regiones, entre muchas otras opciones
Por último, para los inversores más conservadores que quieran dolarizarse está la opción de comprar dólar MEP o CCL. Cabe recordar que para esto tienen que comprar un bono en pesos, esperar las 24 horas de “parking” y luego venderlo en su especie D, que es la que cotiza en dólares.
Fuente: https://www.ambito.com/finanzas/inversiones/para-ahorristas-llego-el-momento-dolarizarse-n5185176