Con el mercado en busca de cobertura, Finanzas evalúa utilizar la deuda atada al dólar recién en septiembre. Este viernes apunta a renovar deuda en pesos por $93.000 M y captar fondeo extra.
El Ministerio de Economía buscará este viernes, en la última licitación de agosto, renovar vencimientos de deuda en pesos por casi $93.000 millones y obtener algunos fondos adicionales para apuntalar el financiamiento neto mensual. Ocurrirá tras días en que el mercado retomó la búsqueda de cobertura contra una eventual devaluación poselectoral, que el Gobierno descarta. Pese a ello, según supo Ámbito de fuentes oficiales, el equipo de Martín Guzmán se guardaría para más adelante la carta de volver a ofrecer bonos dólar linked y apostará por el tipo de instrumentos que la semana pasada le permitieron revertir el traspié de comienzos de mes.
El objetivo oficial es incrementar el fondeo del Tesoro en los próximos meses, con vistas a cumplir la meta presupuestada de terminar 2021 con un porcentaje del déficit fiscal cubierto con asistencia monetaria del Banco Central no mayor al 60%. La premisa de los funcionarios es que una mayor emisión contribuiría a aumentar las presiones sobre el dólar y llevaría al BCRA a tener que acelerar el ritmo de esterilización de liquidez a través de la colocación de Pases y Leliq.
Hasta julio, ese objetivo se cumplió. Pero el traspié en la primera licitación de agosto (cuando sólo se renovó el 65% de los vencimientos semanales) y la reactivación del gasto en la previa de las elecciones hicieron que en la primera quincena de agosto el Central girara utilidades al fisco por $200.000 millones. Así, el financiamiento acumulado hasta ahora, pasó a estar compuesto en un 63% con emisión y 37% con deuda en pesos. Este viernes, la Secretaría de Finanzas que conduce Rafael Brigo saldrá a intentar emparejar esa cuenta.
Ante la profundización de sus rendimientos negativos en el mercado secundario, algunos operadores esperaban que esta semana reaparecieran los bonos dólar linked, que formaron parte del menú de instrumentos colocados el 3 de agosto. En esa licitación, los títulos con cobertura cambiaria a abril y noviembre de 2022 le sirvieron a Economía para captar $44.079 millones, el 30% de lo obtenido. Aunque también fueron utilizados (en momentos de fuerte presión sobre la brecha) para dar al mercado la señal de que el Gobierno no tiene prevista una devaluación poselectoral, tal como señalaron distintos funcionarios del Gabinete económico.
En la última semana, la búsqueda de cobertura incrementó la demanda de bonos dólar linked a 2022. Esto elevó sus precios y profundizó la baja de sus tasas, que ya se movían en terreno negativo. Si bien ayer se mostraron más ofrecidos luego de que Guzmán volviera a descartar un “salto devaluatorio”, el TV22 terminó con un rendimiento del -1,36% y el T2V2, del -1,08%. Esto muestra que el mercado todavía paga para cubrirse de una depreciación del tipo de cambio oficial el próximo año, luego de que el BCRA lo utilice como ancla para desacelerar la inflación en 2021.
“El ajuste por CER (inflación) fue el ganador de los primeros cinco meses del año. No obstante, ante la cercanía de los comicios, se observa un apetito mayor por los activos que ajustan por tipo de cambio. De hecho, si bien nadie sabe qué puede pasar post elecciones, todo indica que la tasa de inflación no se va a acelerar, sino todo lo contrario. Por eso, resulta lógico que la gente o las empresas se inclinen más por los dólar linked”, consideró Matías Roig, director de Portfolio Personal.
Pero, según supo este diario, estos bonos no formarían parte del menú para la próxima licitación, que se anunciará esta tarde. Aunque Finanzas evalúa volver a utilizarlos en septiembre. “Los dólar linked forman parte del monitoreo permanente que hacemos de todos los instrumentos de mercado”, dijo una fuente de Economía. En esta oportunidad, los funcionarios consideran que otros tipos de activos servirán para captar más pesos, como ocurrió la semana pasada con las Ledes cortas ante un mercado que pone límites a la extensión de plazos. Además, como ya fueron utilizadas a principio de agosto, la intención es no “abusar” de las emisiones atadas al tipo de cambio y priorizar abastecer la demanda por tasa fija con rendimientos reales positivos.
Además, el Gobierno apuesta al combo de herramientas lanzadas en los últimos días por el Gabinete económico para atraer a los fondos comunes de inversión (FCI) a las licitaciones del Tesoro. Por un lado, el comienzo de la operatoria del BCRA en futuros de títulos públicos, una iniciativa que permite acortar los plazos de salida de los inversores al garantizarse su compra por parte de la autoridad monetaria en un momento y a un precio determinados, lo que apunta a reducir la volatilidad de estos activos.
En la misma línea, este viernes debutará el programa de Creadores de Mercado, con 13 bancos y sociedades de Bolsa (Alyc) como aspirantes, quienes deberán suscribir títulos públicos (en un principio Ledes, Lepase y Lecer) en las colocaciones primarias y ofrecer posturas de compra y venta de forma cotidiana en el mercado secundario. Por último, ya están operativos los nuevos FCI habilitados por la Comisión Nacional de Valores, que deben estar integrados en un 55% con bonos y letras del Tesoro y el 45% restante puede invertirse en otros fondos money market (de liquidez inmediata).
En lo que va de agosto, Finanzas acumula un endeudamiento extra de algo más de $10.000 millones, que equivale a un rollover del 105,5% de los vencimientos. Si ahora consigue más que los casi $93.000 millones de una Ledes y una Lepase que expiran el martes 31, podrá incrementar esos guarismos mensuales. En el año, el fondeo neto ronda los $400.000 millones y el porcentaje de refinanciación asciende al 120%.