El elevado costo de girar dólares al exterior es una muestra de esa realidad desfigurada. Pese a ello, no se desalienta la fuga de capitales
El dólar MEP soportó menos tensión que las ruedas anteriores, pero para el Banco Central ayer fue un pésimo día porque además de la intervención en el mercado cambiario debió vender USD 196 millones para satisfacer a las empresas que tenían vencimientos de intereses de deuda tomada en el exterior, cuyos dólares en su momento los liquidaron en el mercado oficial. También debió atender la demanda de los importadores.
Además, en el mercado del MEP con el AL30D intervino con casi USD 40 millones. De no ser por la suba del oro de casi 2% que elevó el valor de las reservas en algo más de USD 60 millones y el alza de la libra esterlina y el euro, la caída en las reservas podría haber sido importante. Pero en el balance final se perdieron USD 77 millones que dejaron a las reservas en 42.911 millones.
El MEP en la plaza intervenida terminó con una leve suba de 49 centavos a $ 175,03 y el contado con liquidación, que es inexistente en esta plaza, mejoró 38 centavos a $ 175,21. Donde estuvo más acotado fue contra el GD30 donde se opera sin restricciones y cerró a $ 176,62 (-$ 2).
El contado con liquidación siguió despegándose del MEP y esto elevó el precio del “dólar cable” a 8%. El porcentaje es el costo de girar dólares al exterior transformando dólares MEP en contado con liquidación.
En el Senebi, la plaza en la que el contado con liquidación se negocia entre el cliente y el operador y el precio no aparece en las pantallas, las cotizaciones variaron de acuerdo al instrumento que se utilizó. Cuando se trató de Letras de Descuento que vencen a fin de mes el precio fue de $ 192,30, pero en las operaciones contra acciones llegó a $ 193,25.
El “blue” también cedió por el rigor del fin de mes y perdió 50 centavos a $ 186.
En la plaza mayorista, donde el Banco Central hizo la fuerte venta de casi USD 200 millones, el dólar aumentó 2 centavos a $ 98,75.
Es notable, como los mercados oficiales están tan lejos de los mercados libres. El costo de girar dólares pagando 8% es una muestra de esa realidad desfigurada. Lo que debe preocupar es que esa brecha no desalienta la fuga de capitales.
A los bonos de la deuda con ley extranjera, no les duró su esperanza alcista. Abrieron con fuertes bajas, pero las recortaron en el transcurso de la rueda y terminaron más de 1% abajo. El riesgo país subió 19 unidades (+1,25%) a 1.612 puntos básicos.
Las acciones, en cambio, siguieron manteniendo el interés de los inversores porque tienen precios de oferta. Con una suba de casi 40% del monto de negocios a $ 1.140 millones, el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, subió 1,01%. En su mejor momento estuvo 1,52% arriba. Lo más destacado fue la cementera Hargor (+4,70%), Telecom (3,12%) y Ternium (+2,13%).
Los ADR’s -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- movieron apenas $ 1.987 millones que no les impidieron tener una buena rueda donde sobresalieron Grupo Galicia (+3,2%), YPF (+2,9%) y BBVA (+2,6%).
Septiembre terminó con una caída de las reservas de $ 3.200 millones y con una suba 10,50% del contado con liquidación. El MEP aumentó 6,02%. El “blue” quedó retrasado frente a los dólares financieros ya que subió apenas 2,76%. La caída de los bonos de la deuda se vio reflejada en el aumento del riesgo país de 6,33% a lo largo del mes. Las acciones líderes, quedaron casi sin cambios ya que subieron 0,04%. Los inversores perdieron frente al dólar. Los plazos fijos igualaron la ganancia de los que compraron dólar “blue” pero perdieron frente a los plazos fijos UVA que ajustan por el índice de inflación.