Aumentó en el último año por la devaluación del tipo de cambio y las nuevas emisiones. En 2015 se deberán pagar u$s 2.271 millones y por el default no se sabe como se financiará
La deuda en moneda extranjera de las provincias aumentó en el último año, ya llega al 54% del total, y sólo el próximo año las jurisdicciones deberán desembolsar u$s 2.271 millones para pagar vencimientos de títulos públicos, siendo la provincia y la Ciudad de Buenos Aires las más complicadas.
En los últimos meses, tanto debido a la reducción del stock de deuda en manos del gobierno nacional como por la devaluación del peso, se produjo una redolarización de la deuda provincial. De acuerdo a la consultora Economía & Regiones, la deuda en moneda extranjera correspondiente a títulos públicos y organismos internacionales ya representa el 54% del total alcanzando los $ 100.562 millones, cuando en 2011 no superaba el 30%.
“En este contexto, cada punto de devaluación implica un crecimiento de $ 1.000 millones en el stock de deuda provincial”, advirtieron en la consultora. “Una hipotética continuidad de este proceso intensificará la exposición provincial al riesgo cambiario, teniendo en cuenta que sólo el 5% de los ingresos dependen de la evolución del dólar”, agregaron.
Sin embargo, hoy en día la mayor preocupación pasa por el corto plazo y los fuertes vencimientos que algunas jurisdicciones tienen el año que viene. El gobierno de la provincia de Buenos Aires es por lejos el que deberá hacer frente a los mayores desembolsos. Estos suman u$s 1.526 millones entre capital e intereses, seguido por el de la Ciudad de Buenos Aires que tendrá que juntar u$s 546 millones el año entrante. Con menores vencimientos figuran también Chubut, Córdoba, Mendoza, Neuquén y Salta.
Preocupados por esta situación, antes de la cesación de pagos y la agudización del conflicto con los holdouts, tanto el equipo económico del gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, como el del jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, habían salido a sondear los mercados con el propósito de tomar crédito en el exterior y de esta manera hacerse de los dólares para poder pagar los vencimientos de 2015. Sin embargo, el default en el que entró el Estado nacional hizo descartar esta alternativa y hay preocupación porque más allá de la difícil situación financiera que enfrenta cada distrito por la desaceleración de la recaudación, en los últimos días se sumó otra luz de alerta por la disponibilidad de divisas.
“Si bien la provincia de Buenos Aires tiene superávit fiscal, necesitaba tomar deuda para hacer un roll over. Es probable que si no consigue financiamiento deba restringir el gasto, aumente su deuda flotante o tenga que pedir ayuda al gobierno nacional”, manifestó el economista del Ieral, Marcelo Capello, al ser consultado por este diario.
En agosto la agencia de calificación Standard & Poor’s revisó a la baja las calificaciones de la provincia y de la Ciudad de Buenos Aires así como también las de Mendoza y Córdoba a CCC- porque considera que ninguna contará con la liquidez suficiente para hacer frente a sus obligaciones. “La perspectiva negativa en la escala de rating global refleja el riesgo de que las jurisdicciones sigan enfrentando un deterioro en las condiciones económicas, incluyendo la posibilidad de un acceso más restringido a divisas en un escenario de limitado financiamiento externo debido al reciente default”, alertó a clientes. En este sentido, para el analista fiscal y financiero de Economía & Regiones, Guillermo Giussi, “las provincias van a buscar renovar los vencimientos, colocarle otro bono a sus acreedores con una probable suba de tasas para hacer frente a los vencimientos”. “Es probable que en 2015 haya un cambio de perspectivas por las elecciones y eso le juegue a favor a las provincias para conseguir financiamiento”, agregó.
Por otro lado, Capello advirtió que “la situación de las reservas va a ser crítica el año que viene. Los vencimientos de deuda provincial deberían tener el mismo tratamiento que los nacionales pero en una situación de extrema necesidad uno no debería descartar que el Gobierno priorice sus vencimientos y obligue a las provincias a conseguir sus divisas. No hay que descartar un escenario de ese tipo si la nación tiene una marcada escasez”, advirtió Capello.