Al tiempo que la Argentina resuelve sus propias urgencias, la Fed develará hoy cuál será la magnitud de sus medidas para enfrentar la inflación más alta de las últimas décadas
Hoy es el gran día para los mercados del mundo y para la Argentina. El anuncio que haga la Reserva Federal de los Estados Unidos, al terminar la reunión del Comité de Operaciones de Mercado Abierto, es clave para el país y la región. Se descarta que comienza una era más dura para la economía norteamericana, porque el objetivo de la Reserva Federal es atacar la inflación más alta de los últimos 40 años.
Lo que hoy se sabrá es si la estrategia será de shock o gradual. La Fed planea vender parte de los bonos del Tesoro de Estados Unidos. Durante la pandemia adquirió USD 9.000 millones. Si vende una parte, el precio de los bonos bajará, pero su rendimiento aumentará y eso equivale a una suba de tasas porque los capitales del mundo los buscarán para conseguir rendimientos sin riesgo. La tasa de los bonos ayer subió a 1,78%.
Los mercados norteamericanos con sus bajas en las acciones comenzaron a descontar el comienzo de una era menos benigna porque se retiran subsidios y ayudas del Banco Central de los Estados Unidos. La Argentina, con la fuerte baja de sus títulos de la deuda, comenzó a descontar esta adversidad hace tiempo. Ayer tuvo una leve recuperación en los Bonos Globales 2038 (+1,41%) y 2041 (+0,49%) que permitieron que el riesgo país, que estaba a punto de perforar el techo de los 2.000 puntos, bajara 18 unidades (-0,9%) a 1.944 puntos básicos.
Los bonos no habían empezado bien el día, pero a lo largo de la rueda comenzaron a mejorar sus paridades. Por eso, los dólares financieros estaban en retroceso. Pero sobre el final cayó 1,50% la valuación en pesos del AL30 que permitió que el dólar MEP subiera $ 2,09 a $ 218,84.
El contado con liquidación tuvo a su favor la caída del GD30C (cable) de 1,16% y subió apenas 25 centavos a $ 227,75 aunque en las operaciones contra acciones cotizó a $ 228,80.
El “blue” sumó otro récord al crecer 50 centavos a $ 219,50 en un mercado donde hubo varias operaciones fuertes. La divisa libre sigue por debajo de la cotización de los dólares financieros. El dólar mayorista aumentó 9 centavos a $ 104,62. El ritmo de devaluación continuó por debajo de 3% y será un problema a futuro para el Gobierno que ahora está centrado en negociar con el FMI. En esta plaza, el Central no pudo comprar divisas y sus reservas subieron 2 millones a USD 38.952 millones por el alza mundial del oro.
La Bolsa tuvo “el rebote del gato muerto” que sucede a una fuerte caída. El hecho de que el Gobierno intente mostrar un mejor clima en las negociaciones con el FMI, con mensajes de que las están acelerando, animó a los inversores a asumir riesgos. Además, especularon con los precios de liquidación que dejó el fuerte golpe de la rueda del lunes.
El monto negociado fue de $ 1.257 millones, un volumen elevado que recupera parte de lo que se fue el día anterior. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, subió 5,15%. Las acciones que más aumentaron fueron las de Banco Galicia (+9,01%) y Cresud (+7,08%).
Entre los ETF’s, índices de acciones y materias primas, sobresalió el de Energía (XLE) que aumentó 3,8%. Brasil tuvo buen comportamiento y el ETW que promedia 85% de las acciones de la Bolsa de San Pablo, avanzó 3%. Los que apostaron a los índices más importantes de Wall Street y el Nasdaq volvieron a soportar pérdidas de hasta 2,3%.
Los ADR’s, que incluyen los ETF y certificados de tenencias de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York, operaron $ 4.629 millones, un 20% menos de lo que venían negociando. Lo mejor estuvo en Despegar (+5,9%) e YPF (+4,4%).
Llamó la atención la aparición de compradores de dólares futuro en el Rofex, donde el Banco Central es dominador con sus ventas. El FMI le autoriza un cupo de alrededor de USD 5.000 millones para controlar esta plaza que tiene como referencia al dólar mayorista. Las subas se dieron después de los fines de mes de marzo que quedó en $ 114,16 (+0,05%), fin de abril con $ 118,85 (+0,08%) y fin de mayo con $ 124,05 (+0,08%).
Entre los bonos que ajustan por el tipo de cambio (dollar linked) el TV22 aumentó 0,14%. Todas, son señales de devaluación. Los bonos indexados siguen siendo los más demandados, aunque su sobretasa haya desaparecido porque cotizan sobre la par. El Boncer 2022 aumentó 0,23%.
La otra novedad es la licitación de Bonos del Tesoro convocada por la Secretaría de Finanzas. Esperan recaudar $ 240.000 millones con dos letras de descuento, tres de liquidez y una sola de las más buscadas por los inversores, que son las LECER que ajustan por la inflación. Si no aumentan las tasas de las letras no indexadas, deberán acudir a entes oficiales para que compren estos bonos.
La semana lleva dos ruedas que parecen eternas y se complicaron más por los rumores de que el Gobierno postergará el pago del viernes de USD 730 millones al FMI, algo que parece absurdo porque el martes deberá pagar USD 365 millones y tiene en caja poco más de USD 700 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG), proporcionados por el organismo como ayuda adicional por la pandemia, que se perderán si no cumple en tiempo y forma con los vencimientos.
No habrá paz para los mercados desde hoy hasta el viernes. Los inversores viven una montaña rusa con las bolsas norteamericanas y los bonos y dólares argentinos.