Las importaciones cerraron abril nuevamente en números elevados, cercanos a u$s 7000 millones, anticiparon en el equipo económico. El Ministerio de Desarrollo Productivo lanzó créditos por $70 mil millones para sumar más exportaciones y sustituir importaciones.
El Gobierno tiene muy buenas expectativas para la actividad en este 2022. Considera que el PBI podría crecer entre el 7 y el 10% por lo observado durante el primer cuatrimestre, pero que en cambio cerraría en 5% por la “falta de dólares” en las reservas. Para sumar divisas, buscan que más pymes puedan sumarse a la exportación y sustituir importaciones, por lo que el Ministerio de Desarrollo Productivo lanzó créditos por $70 mil millones.
En medio de las internas y la inflación récord, el Gobierno mantiene optimismo ante los datos de la actividad, que luego de un crecimiento del 10,3% en 2021, podría volver a crecer en 2022 y consolidar dos años consecutivos en alza, después de una década. El equipo económico considera que estará por encima del rango del 3,5-4% que firmaron con el FMI, y superior al 3,4% que pronostican las consultoras del REM.
Fuentes del gabinete económico se animan a proyectar una mejora del PBI de al menos 5% para 2022. Consideran que podría trepar hasta el 7%, basados en la actividad del primer cuatrimestre. “Podríamos crecer al 10% si tuviéramos u$s 30 mil millones más en el Banco Central, el problema son los dólares”, contó a Ámbito una fuente oficial.
Pese a que las exportaciones se encuentran en valores históricos, desde el equipo económico explicaron que el superávit comercial estará muy por debajo de los u$s 12 mil millones que proyectaban a principios de año. Explican que se debe al efecto de la guerra y la pospandemia, por los precios inéditos en la energía, los insumos y la logística. En abril, las importaciones cerraron por debajo del récord de marzo, pero nuevamente elevadas, cercanas a los u$s 7000 millones, anticiparon fuentes oficiales.
A diferencia de lo que se esperaba a principio de año, las limitantes al crecimiento en 2022 no pasaran tanto por el covid o la energía. En cuanto al coronavirus, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, le aseguró al equipo económico que no deberían preocuparse por el aumento de casos, debido a que la vacunación hace que sea más leve. En cuando a la energía, la preocupación bajó luego del acuerdo alcanzado con Bolivia para la provisión de gas.
De todos modos, en el Ministerio de Desarrollo Productivo mantuvieron reuniones este miércoles por la tarde con el titular de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, que les acercó una propuesta para coordinar paradas de planta en caso de posibles faltantes.
La variable inevitable a monitorear que admiten que podría impactar en el crecimiento es la inflación, en caso de mantenerse en estos niveles. Aspiran a que mayo baje a valores del 4% y que comience a estabilizarse cuando se “absorba el shock” de la suba de commodities de febrero por la guerra. De hecho, en la primera semana de mayo, pese a que la inflación fue del 1,2%, según la consultora Eco Go, el rubro panificados, cereales y pastas bajó 1,2% por la puesta en marcha del fideicomiso. Si bien con la foto de los valores actuales estiman que cerrará el 2022 en 60%, aspiran a que “afloje” y pueda estar por debajo.
Aun en este contexto de elevada inflación, que será ratificada este jueves por el Indec para abril, el Gobierno considera que un plan de shock tradicional no funcionaría como ancla, como ocurrió con el plan Austral. “Ahí había 30% de inflación mensual y estaba todo indexado. Acá están desalineados los mecanismos de indexación, por suerte”, contaron dentro del Gobierno.
Pese a que el acuerdo con el FMI no tiene un ancla (salarios, inflación o tarifas), dentro del Ministerio de Economía consideren que logrará “anclar” las expectativas. Si bien el Gobierno repite que el salario le tiene que ganar a la inflación, y aseguran que “las empresas tienen margen para subirlos”, monitorean que “no entren en una espiral”.
Créditos para exportar
Para el Gobierno, la principal limitante para el crecimiento económico es la “restricción externa”. Por este motivo, este miércoles el Ministerio de Desarrollo Productivo lanzó créditos por $70 mil millones para incrementar exportaciones de pymes, y sustituir importaciones.
Habrá una línea de Impulso a las Exportaciones, por $50 mil millones, para agro e industria y otra de Sustitución de Importaciones, por $20 mil millones, para laboratorios, autopartistas, minería, petróleo y calzado. Las otorgarán las entidades financieras, con créditos de entre $100 y $500 millones, con una tasa del 35% a 60 meses.
El plan fue presentado ante decenas de pymes en el Ministerio de Desarrollo Productivo. “El anuncio viene a resolver un tema clave, tener un modelo de crecimiento económico sostenible. Buscamos que el desarrollo del sector productivo contribuya a dar sostenibilidad macroeconómica, exportando más y ahorrando divisas de importaciones”, aseguró Matías Kulfas, titular de la cartera.
En 2021, las exportaciones de pymes fueron de u$s 10.800 millones, el dato más alto en los últimos 6 años, según informó el secretario Pyme, Guillermo Merediz. “Hubo un decrecimiento de pymes exportadoras en los últimos años, y por primera vez en 2021 se incorporaron más, hubo 400 que exportaron o lo volvieron a hacer”, afirmó Merediz en el acto. En primera fila, se encontraba el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, el titular de CAME, Alfredo González y el presidente de la cámara de la Indumentaria, Claudio Drescher.