En el inicio de la semana los valores muestran saldos positivos en el mercado de Chicago. La decisión de India de cerrar las exportaciones del cereal, entre los principales motivos que impactan en las subas.
El precio internacional del trigo vuelve a registrar fuertes subas en el mercado de Chicago, en medio de las consecuencias del ataque de Rusia a Ucrania y los problemas climáticos en los Estados Unidos.
Los contratos con vencimiento en el mes de julio suben un 4,35% o USD 18,50 y la tonelada cotiza a USD 451,19. El viernes pasado se conoció la decisión de India se cerrar las exportaciones de trigo en medio de la suba de los precios internos. Se trata del segundo mayor productor mundial del cereal, luego de China. Para los analistas del mercado, se trata de un abrupto cambio de política que complica la situación en el contexto de la crisis ruso-ucraniana.
Además el mercado sigue de cerca la situación climática en los Estados Unidos, con ausencia de precipitaciones, y a los últimos informes publicados sobre los los stocks mundiales del cereal que llegarían a mínimos de seis años, considerando que el almacenamiento en Estados Unidos tocaría un piso de nueve años.
Por otro lado, la soja y el maíz se contagian de estas subas al compás de que se espera que persista la demora en la siembra en los Estados Unidos. El contrato con vencimiento en julio próximo de la oleaginosa cotiza a USD 609,50, y el cereal a USD 313,70.
En lo que respecta al plano local, la cadena triguera se prepara el inicio de una nueva campaña, atravesada por la falta de humedad en los suelos de algunas regiones productivas, como es el caso de Córdoba, el aumento de los insumos, especialmente los fertilizantes, y la intervención del Gobierno limitando las exportaciones, con el objetivo de desacoplar los valores internacionales del cereal de los alimentos, algo que ya sucede en el mercado por el efecto de las retenciones del 12% y del desdoblamiento cambiario.
En ese sentido, el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, advirtió que “los productores argentinos recibimos el precio del trigo más bajo del mundo. El valor está desacoplado de los precios internacionales ya que, a promedios de la primera semana de mayo de 2022, recibió solo el 42% del valor internacional”.
La semana pasada se presentaron diferentes proyecciones, las cuales coinciden en una menor siembra y producción de trigo. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó una merma del área sembrada del 1,5% en relación a la campaña pasada y que alcanzaría las 6,6 millones de hectáreas, y con una producción en torno a los 20,5 millones de toneladas, casi un 9% de baja en relación a la campaña anterior. Por su parte, la cebada presentará un escenario de siembra muy diferente al trigo: se proyecta un área de 1,3 millones de hectáreas para una cosecha de 5,4 millones de toneladas, un incremento interanual del 3,8 %, explicado en mayor medida por la expansión del área sembrada.
Intervención oficial
En un mercado de trigo intervenido por el Gobierno, con los denominados volúmenes de equilibrio para las exportaciones del cereal y la puesta en marcha de mecanismos con el objetivo de hacer frenar la suba del precio del pan, son medidas que generan incertidumbre entre los productores y demás integrantes de la cadena que luego derivan en decisiones de sembrar menos hectáreas del cereal y en aplicar inferior tecnología a la de campañas anteriores.
El trigo y el maíz, han sido los cultivos que más crecieron desde 2016 hasta esta parte, en siembra y producción, en un contexto de políticas que acompañaron al sector, especialmente liberando las exportaciones y no aplicando modelos de intervención que luego afectan a los precios que percibe el productor. Para el trigo, parece ser que el panorama cambia a partir de la campaña que está por comenzar.
El último mecanismo de intervención diseñado por el actual Gobierno, fue el Fondo Estabilizador del precio del Trigo, con el objetivo de subsidiar el precio de la harina con destino a las panaderías y de esa manera hacer bajar el valor del kilo de pan. Una decisión del Secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, que hasta el momento no recibió el aval del sector molinero que no participará del mismo. Las pymes molineras ya se pronunciaron en ese sentido, y la Federación de la Industria Molinera otorgó libertad de acción a sus asociados. Hoy a las 16hs habrá una reunión entre las partes en la sede de la Secretaría.