El Estado logró bajar las cotizaciones paralelas con controles, pero el mercado estima que el problema del dólar no está resuelto y el oficial tendrá que saltar hasta unificarse al paralelo
La conducción del Banco Central (BCRA) a cargo de Alejandro Vanoli logró bajar las cotizaciones paralelas del dólar a fuerza de controles regulatorios en el sistema financiero, una caída de la expectativa de devaluación para este año y los acuerdos con China, Francia y las cerealeras. La brecha cambiaria se redujo al 47% ayer. En este contexto, el gobierno emite dos bonos dollar-linked de la serie Bonad en menos de un mes. Pero los compradores de estos bonos (a 2016 y 2018) apuestan a que el oficial se acercará al paralelo el año que viene.
"El Gobierno puede aspirar a volúmenes importantes de nueva deuda, dolarizada aunque pagadera en moneda local", dijo Jorge Vasconcelos, en un informe de la Fundación Mediterránea. "Se trata de una muy buena opción para los ahorristas, que encuentran alguien del otro lado del mostrador dispuesto a endeudarse con una cláusula que pocos elegirían; después de todo pagan los contribuyentes, no los funcionarios: si el próximo gobierno decide unificar los mercados cambiarios, el tipo de cambio oficial seguramente dará un brinco para acomodarse en un andarivel intermedio en la brecha que hoy lo separa del blue", explicó.
Sucede que desde principios de octubre, el BCRA defiende el tipo de cambio oficial ($ 8,52); el paralelo perdió un 20% y el contado con liquidación, 16%, y los futuros continúan cayendo, no sólo de la mano de sanciones a entidades financieras, sino también con la activación del swap con China, el crédito del Banco de Francia y las liquidaciones de divisas de las cerealeras y de las licitaciones de 3G y 4G. Por la caída en la expectativa de devaluación para este año, subieron los rendimientos de los dollar-linked a un promedio del 3% (el más corto al 9%).
Para los próximos años, el escenario se prevé diferente.
"Los bonos dollar-linked se han vuelto particularmente atractivos ante la creciente expectativa de reunificación cambiaria luego del cambio de Gobierno, en diciembre de 2016", dijo Nicolás Dujovne en su último informe. "Ya no parece tan lejano ese horizonte y la idea de un nuevo gobierno que elimine el cepo cambiario no resulta descabellada", agregó.
"El precio actual del tipo de cambio de contado con liquidación de $ 13 está cerca de los valores que podría tener un tipo de cambio único si se eliminase el cepo en el verano de 2015 a 2016", explicó Dujovne, quien estimó que si Argentina sale del default, el tipo de cambio reunificado se ubicaría en $ 11,5 a comienzos de 2016; si no arregla con los holdouts, en 13,6 pesos.
Para Delphos Investment, la fortaleza del dólar en el mundo implica "la insostenibilidad de este tipo de cambio en el mediano plazo, lo que beneficiaría a los bonos dólar link". Según explicó en su último informe Financiero y de Renta Fija, la devaluación de enero pasado fue precedida por un movimiento ‘devaluacionista‘ de las economías productoras de materias primas, que nuevamente se vuelve a observar por estas semanas", en un contexto en que el índice de inflación local es superior al de los países vecinos y a la devaluación de este año (un 6%) generando una pérdida de competitividad del peso.
"La presión interna, marcada por la necesidad de financiar el déficit fiscal de diciembre y la caída estacional de la demanda de pesos en el verano, podría llegar a controlarse; ahora bien, el frente externo está fuera de la voluntad y el alcance de las autoridades locales", dijo la consultora en su último informe.
Proyecciones para 2015
El tipo de cambio estará más presionado si el país no obtiene financiamiento externo, ya que sobrarán los pesos por la dominancia fiscal sobre el Central y faltarán los dólares comerciales si cae el precio de la soja. Aunque la presión devaluatoria podría contrarrestarse con la emisión de otros títulos dollar-linked y el uso de las Lebacs como instrumentos de absorción de la base monetaria, "con tasas de interés reales negativas, atraso del tipo de cambio real y expansión monetaria permanente es difícil conseguir una verdadera estabilización de expectativas", dijo Delphos. "Incluso si el frente interno puede controlarse, el frente externo impone presiones que están fuera del alcance de las autoridades".
Para Dujovne, la clave estará en si aumenta la demanda de dinero: "Si el tipo de cambio único post 2015 no está muy lejos de $ 13 por dólar, las tasas en pesos que reciban de aquí en adelante los tenedores de moneda doméstica serán positivas medidas en términos de su rendimiento esperado en dólares".