La cotización libre perdió dos pesos en el día y acumuló una ganancia de 35 pesos en el mes. El BCRA vendió USD 87 millones en el mercado. El S&P Merval ganó 26% en enero y el bonos en dólares escalaron 23% por la recompra de deuda que hizo el Tesoro
Pasó el mes de enero y dejó excepcionales beneficios en el plano financiero. Prácticamente no hubo jugadas perdedoras para los inversores en el primer mes del año, aún cuando la muy alta tasa de inflación obliga a obtener importantes rendimientos para no asumir pérdidas en términos reales.
El dólar libre terminó este martes con una baja de dos pesos, a $381 para la venta, en su segundo día en descenso. No obstante, el billete volvió a ganarle a la inflación en el arranque de 2023, con una mejora de 35 pesos o un 10,1% a lo largo de enero. Hay que señalar que el dólar “blue” tocó un récord intradiario de $387 el lunes 30.
Con un dólar mayorista que ascendió 44 centavos en el día y terminó a $187, la brecha cambiaria quedó en el 103,7% respecto del dólar libre. El tipo de cambio oficial subió un 5,6% en el primer mes del año, ligeramente debajo del 5,9% de diciembre y en sintonía con la inflación esperada.
También las cotizaciones bursátiles finalizaron con alzas entre el 7% y el 8% en el mes. Si bien éstas quedaron detrás del “blue”, que fue aproximándose al valor del dólar “turista” o “Qatar” (a $388,71 en promedio), le ganaron a la inflación y también a la tasa de interés en el balance mensual. El “contado con liquidación a través del Global 230 (GD30C) en ByMA se pactó este martes a un cierre de $368,20, y el MEP con el Bonar 2030 (AL30D) alcanzó los 359,59 pesos.
El Banco Central efectuó este martes ventas por USD 87 millones en el mercado mayorista, donde se operaron elevados USD 293,2 millones en el segmento de contado (spot), unos USD 140 millones más que el lunes. De este modo, al terminar el primer mes del año, la entidad monetaria obtuvo por sus intervenciones un saldo neto negativo de USD 190 millones en enero.
“Según indican fuentes del BCRA, las ventas estuvieron alineadas con la expectativa previa y reflejaron la liquidación anticipada por el programa exportador de soja, combinada con la caída de ventas de cereales producto de la importante sequía que afecta a los sectores productivos”, comentó Gustavo Quintana, agente de PR Corredores de Cambio.
“Pese a la caída de los ingresos por la sequía -en enero de 2022 el complejo cerealero liquidó por USD 2.440 millones frente a los 900 millones aproximado de este mes- las ventas en el mercado fue de sólo 60 millones adicionales a lo ocurrido en 2022, cuando alcanzó USD 130 millones”, apuntó Quintana.
Los expertos de Aurum Valores recordaron que “a pesar de las restricciones a las importaciones” se trató del “peor enero en materia de acumulación de divisas desde 2014. A los USD 190 millones además habrá que sumar no menos de USD 400 millones de intervención con bonos”, debido a la recompra de deuda encarada por el Ministerio de Economía.
Asimismo, las reservas internacionales brutas del Banco Central disminuyeron unos USD 3.000 millones en el primer mes del año, principalmente por pagos de deuda.
“La inflación nuevamente se está escapando de los parámetros que manejaba el gobierno y dejan en evidencia la incapacidad de los controles de precios”, afirmó a Reuters Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso. “Por el momento, no hay razones teóricas para pensar que la inflación va a bajar y la incertidumbre en un año electoral puede incluso empeorar la situación”, estimó.
Las acciones y los bonos soberanos de Argentina cerraron enero con fuertes ganancias alentados por tomas de posiciones, ante atractivos valores y suculentos retornos, en medio de un panorama económico y político incierto, y una alta inflación que rondaría el 6% en el primer mes del año.
La plaza bursátil se destacó entre sus pares externos con un alza mensual del 25,5% en pesos y de 17,5% en dólar “contado con liqui”, al tiempo que los bonos crecieron un 13,8% en su promedio en pesos, en el mismo período alentados por un reciente anuncio de recompra de deuda externa.
Justamente este “driver” empujó a ganancias promedio de 23% para los bonos Globales -en dólares con ley extranjera- emitidos con el canje de deuda de 2020 y que son operados en Wall Street. Acorde a la mejora de los bonos en dólares, el riesgo país se ubicaba en los 1.817 puntos básicos para la Argentina a las 18.30 horas, con un recorte de 379 unidades en el primer mes del año.
“Los activos domésticos buscan ir intercalando al menos un respiro tras la fuerte recuperación de los últimos tiempos, toda vez que una decidida toma de ganancias aún se sigue demorando y los amagues lucen demasiado insuficientes como para depurar aquellas manos orientadas al trading y consolidar los niveles alcanzados”, dijo el economista Gustavo Ber.
“Varios analistas especulan con la posibilidad de que se extienda el monto destinado a la recompra de estos instrumentos”, estimó Fernando Staropoli, ejecutivo de Cuentas de Rava Bursátil.
El índice bursátil líder S&P Merval mejoró un 3,1%, a un cierre de 253.549 puntos, siempre liderado por el alza anotada en acciones de los segmentos energético y financiero con buena liquidez y cotización externa.
Entre ellas se destacaron los papeles de la petrolera estatal YPF con un alza diaria del 5,9% y un acumulado mensual del 39% y los títulos de Grupo Financiero Galicia que crecieron un 5,7% este martes y subieron un 49% en enero.
Entre los ADR y acciones de compañías argentinas que son negociadas en dólares en Wall Street hubo papeles que ganaron más de 30% a lo largo de enero: Mercado Libre (+39,6%), Grupo Galicia (+37,4%), Banco Macro (+33,9%), Despegar (+32,5%), IRSA (+32,4%), Tenaris (+31,8%) e YPF (+30,1%, a USD 11,96).
“Las elecciones presidenciales de octubre de 2023 retrasarán aún más la recuperación de costos de las empresas de servicios públicos, ya que la inflación se mantiene en torno al 85% anual”, dijo la calificadora de riesgos Moody´s.
Operadores señalaron a Reuters que la recompra de deuda externa tuvo como objetivo que los bonos en dólares suban más que los de pesos para así descomprimir el mercado de cambios en momentos de reducida liquidación de divisas por parte del sector agropecuario.