El S&P Merval subió un 0,9%, a 249.580 puntos, pese a la tendencia negativa de Wall Street. Los bonos en dólares se hundieron 3%
La plaza bursátil argentina se movió en alza para las acciones y en baja para los bonos soberanos este miércoles. Ayudó a la renta variable las recompras de carteras luego de toma de utilidades al cierre de febrero, con inversores atentos a noticias políticas y financieras de importancia en el ámbito nacional.
El índice S&P Merval de Buenos Aires ganó un 0,9%, a 249.580 puntos al cierre. Wall Street inició marzo en rojo para los índices Nasdaq (-0,7%) y S&P 500 (-0,5%).
Los bonos Globales -en dólares con ley extranjera- se desplomaron un 3% en Wall Street, con un riesgo país de JP Morgan que subía 76 unidades, a 2.036 puntos básicos a las 18:10 horas.
El presidente Alberto Fernández brindó su discurso de apertura en las sesiones ordinarias del Congreso, en un año donde las elecciones generales dominan el escenario de negocios, aunque no avanzó en anuncios económicos.
Mientras tanto, se aguardan señales del Fondo Monetario Internacional (FMI) en el marco de un acuerdo en el que el Gobierno espera lograr que se reduzca el volumen exigido de reservas del BCRA, en momentos donde la sequía del campo complica la liquidación de dólares, más la proyección de una nueva alza de tasas por parte de la Reserva Federal estadounidense (Fed).
La calificadora Fitch reportó que espera que las presiones financieras y crediticias se intensifiquen en el país en 2023, al tiempo que la capitalización de los bancos alivia la exposición del Gobierno.
El mercado financiero argentino terminó con un balance negativo el mes de febrero, por una toma de utilidades tras una recomposición carteras iniciada en octubre, mientras que los inversores aguardan anuncios desde el FMI sobre una posible flexibilización de los objetivos trimestrales pactados con el país un año atrás.
“Durante febrero, la coyuntura económica tuvo un marcado deterioro, con perspectivas de mayor inflación, recesión, mayor desequilibrio fiscal y menos reservas internacionales. Este contexto, sumado a la mala performance de los bonos emergentes, hizo que los bonos soberanos cerraran el mes con una caída de 10% pese a su recuperación de la última semana. El riesgo país volvió a ubicarse en torno a los 2.000 puntos básicos. El Merval frenó el rally alcista y mostró una leve caída, aunque aún se mantiene entre los niveles más altos desde las PASO de 2019. Pese a este contexto de aceleración de la inflación y pérdida de reservas, los dólares financieros operaron estables y la brecha cambiaria cedió 10 puntos porcentuales. Los bonos en pesos tuvieron subas generalizadas y se destacaron los ajustables por tipo de cambio e inflación con vencimiento en 2024″, detalló Cohen en un informe.
El panel de acciones líderes completó el mes pasado con una baja de 2,4% en pesos, y de 2,1% en dólares “contado con liquidación”. En 2023 mantiene una ganancia de 22,5% y 15%, respectivamente.
La caída mensual del S&P Merval se dio a la par de la tendencia bajista de Wall Street, donde el índice tecnológico Nasdaq arrojó un balance negativo de 1,1%, el Dow Jones de Industriales restó 4,2%, y el promedio S&P 500, un 3,6 por ciento.
Los bonos soberanos interrumpieron la notoria recuperación de precios iniciada en octubre y en lo que fue un febrero muy volátil finalizaron con una caída de 7,4% en promedio, según la evolución de los Globales en dólares con ley extranjera en Wall Street.