El Bonar 24 y el Boden 15 ya cotizan en sus máximos. Inversores no quieren desprenderse de sus activos por las ganancias que tendrán si el próximo gobierno arregla con los holdouts
La sólida demanda que obtuvo la colocación de deuda del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires refleja que el apetito por los bonos argentinos permanece intacto entre los inversores y concuerda con el nivel récord que vienen experimentando activos en dólares como el Bonar 2024 ó el Boden 2015, que este mes superaron la barrera de los u$s 100. Incluso los bonos en default acumulan ganancias de 3,6% este año, más del doble que el promedio de los mercados emergentes, según datos de la agencia Bloomerg.
Todo esto, a pesar del escándalo político que afronta el Gobierno, sumido en un contexto de cesación de pagos que limita al Banco Central a hacer lo imposible por sostener el nivel de reservas. Es que el año electoral promete para el mercado un cambio de gobierno y con él, un posible arreglo con los holdouts y por esto los inversores ahora buscan mantener sus activos y aprovechar la oportunidad de compra que ofrecen los bonos más rezagados. Esto explica, por ejemplo, la suba de 5,8% que tuvo el cupón PBI en dólares en lo que va del mes.
«Creemos que este año el calendario político va a ser un fuerte catalizador sobre el mercado y el impacto lo vamos a ver cerca de las elecciones. Los precios están dando vueltas alrededor de eso. Lo que se ve es una situación técnica del mercado muy constructiva, incluso en la demanda de otros activos como los de la Ciudad y la provincia de Buenos Aires», dijo Sebastián Vargas, analista de Barclays.
Los bonos empezaron a subir en forma gradual a mediados de diciembre y continuaron su recorrido alcista este año. A pesar de la mínima caída de ayer de 0,24%, el Bonar 2024 cotiza a u$s 101,58 y acumula desde el 16 de diciembre una ganancia de 10,25%. En el mismo período, el Boden 2015 – que ayer subió 0,2% – sumó una ganancia de 6%. Por su parte, los Discount en dólares que están abarcados por el default selectivo, registran un aumento de 9,5%.
De acuerdo a Daniel Chodos, estratega de deuda soberana de Credit Suisse, el incremento en el precio de los bonos se debió a que el mercado parece descontar una transición hacia un nuevo gobierno sin crisis. Los miedos a una depreciación a principio de año se fueron disipando con las reservas ancladas en u$s 31.000 millones y aunque parte del aumento en las arcas las componen los swaps con China en yuanes, igual ayudaron a contener expectativas de devaluación.
Asimismo la suba de precios se explica porque en realidad no hay casi vendedores, lo que genera que cualquier demanda haga subir los precios. «Los inversores extranjeros no quieren desprenderse de los bonos argentinos por la buena perspectiva de retornos que tienen si el próximo gobierno arregla con los holdouts. Creo que puede haber volatilidad durante el resto del año, pero la tendencia en los precios pareciera que va a seguir siendo para arriba», sostuvo Chodos.
Para Jorge Piedrahita, socio del fondo Torino Capital, de ahora en más, la oportunidad de compra estará en las caídas que pueden sufrir los activos. En este caso, recomienda los bonos más líquidos y a largo plazo, como el Bonar 2024. Pero además destaca los bonos de la provincia de Buenos Aires, en especial los que vencen en 2021, que rinden por encima del 11,5%.
«Entiendo que el aumento de los precios argentinos están dados por la importancia de expectativas positivas de cambio de régimen. Puede haber eventos de mercado relacionados con el contexto internacional o de Argentina que produzcan caídas en los precios, pero a estos niveles deberían ser tomados como oportunidades de compra», remarcó Piedrahita.