La Ciudad colocó un bono a 6 años en los mercados internacionales. La tasa fue de 8,95%.
El Gobierno porteño consiguió 500 millones de dólares. La colocación de deuda se está instrumentando en estos momentos y la tasa de corte se ubicó en el 8,95% anual. Se trata de una emisión a 6 años de plazo y los fondos que reciba le permitirán saldar la última cuota de un bono Tango, por US$ 475 millones, que vencen a fines de marzo.
Es decir que esos dólares no podrán ser computados por el Banco Central como un refuerzo de las reservas, sino que así como entren a las arcas de la ciudad, se irán. En verdad, la Ciudad liquidará los dólares y recibirá pesos. Pero el 3 de abril volverá a hacerse de dólares (al tipo de cambio oficial de ese momento) para pagar la amortización del bono Tango.
Se trata de una típica operación de «roll over», mediante la cual se van refinanciando los vencimientos. En este caso, la Ciudad tomó deuda al 8,95% para saldar un bono que devengaba una tasa del 12,5% anual. Es lo contrario a la política de Casa Rosada, que opta por pagar y no renovar, con el tremendo esfuerzo fiscal que eso significa.
Si bien la tasa que pagará el gobierno de Mauricio Macri es algo inferior a la que debería desembolsar el Gobierno nacional, sigue siendo alta en comparación con operaciones similares que realizan países de la región. Pero a la Ciudad le resulta imposible diferenciarse del elevado piso a las tasas de interés que fija el riesgo soberano argentino.
La demanda de los nuevos bonos cuadruplicó al tope de 500 millones que estaba dispuesto a colocar el Gobierno. Una clara señal de que los inversores aparecen en forma masiva cuando se ofrece una tasa que supera por mucho a la de casi todos los países del mundo. Por eso en esta emisión se intentó (aunque no se logró) realizar un call a 2 años de plazo. Esto significaba que el Gobierno se hacía del derecho a recomprar estos bonos, a determinado precio, en 2017. Los funcionarios de Macri están convencidos que dentro de 2 años la tasa Argentina será mucho menor, y querían hacer el rescate anticipado para no seguir pagando por 4 años más la tasa del 9%. Pero los bancos colocadores advirtieron que no había mucho interés entre los inversores en aceptar esa cláusula, justamente porque se quieren asegurar 6 años de tasas altas.
El gobierno porteño realizó un «roadshow» para esta colocación por Estados Unidos, Londres y Asia. Al frente de la operación está el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti. La Ciudad contrató para esta ocasión a los bancos HSBC, Merrill Lynch y JPMorgan.
A diferencia de la Provincia de Buenos Aires (que también tiene en sus planes salir al mercado internacional en busca de fondos) la Ciudad no tiene que esperar la aprobación del Gobierno nacional para emitir deuda. En rigor, el gobierno de Daniel Scioli tenía el permiso de Economía para salir al mercado en 2014, pero por la crisis con los fondos buitre y el default parcial de la deuda, no pudo concretar la colocación. Y para 2015 necesita un nuevo permiso, que aún no fue otorgado.
Fuente: http://www.ieco.clarin.com/Gobierno_porteno-Ciudad-Macri-deuda-500_millones-9_0_1301870065.html