En un contexto en el que todavía faltan cerrar negociaciones paritarias y el pago de aguinaldo, y con el dato de que el valor de los futuros del dólar continúa planchado, por lo que la expectativa devaluatoria continúa siendo baja, algunos economistas ya creen que el segundo semestre del año se desarrollará con un repunte del consumo considerando que el dinero que no se será dirigido a la compra de dólares, en un mercado cambiario controlado.
El Banco Central publicó el viernes que intervino en el mercado de futuros de la divisa norteamericana generó un nuevo desplazamiento a la baja de la curva de las tasas de interés implícitas en los futuros de dólar estadounidense de hasta 100 puntos básicos. En Rofex, el viernes se negociaba un dólar a $9,95, por lo que el Gobierno nacional se asegura un recambio presidencial con una divisa con precio menor a 10 pesos. En las pizarras de la City porteña el dólar arrancará la jornada hoy a $9,05, por lo que la diferencia con los contratos de dólar a fin de año no llegan al 10%.
Entre algunos economistas exista la certeza de que un dólar menos atractivo tendrá como consecuencia un despegue del consumo, lo que llevaría al oficialismo a enfrentar las elecciones en un marco económico favorable.
“Para el segundo semestre, con un poder adquisitivo fortalecido por paritarias, con aguinaldos y con la última modificación en el Impuesto a las Ganancias y contenida la devaluación, hay varias alternativas, las más sofisticadas como plazos fijos o bonos y también al consumo”, explicó a este diario Agustín D’Attelis, economista de la Gran Makro. “Calculamos que este año la economía terminará con un repunte del 1%, explicado principalmente por el consumo”, dijo.
Por su parte, el economista Daniel Carbonetto, del Centro de Estudios Socioeconómicos Sindicales, afirmó que esperan un repunte mayor de la economía con “un crecimiento de la demanda efectiva”. Carbonetto señala como factor principal que preparó el terreno para el despegue económico al control del dólar blue y la baja de la expectativa devualuatoria. “A pesar de lo que está pasando con el tipo de cambio en Brasil, Argentina pudo mantener con esfuerzo un tipo de cambio real sin dejar de ser competitivo. Parte de la explicación a por qué la economía va a volver a crecer es cómo el Gobierno logró controlar al dólar paralelo”.
De acuerdo a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), el consumo aumentó en lo que va del año un 2% por encima de igual periodo de 2014, y estimó que “esa tendencia de aumento del consumo se mantendrá a lo largo del año, e incluso puede crecer”. “En 2014 tuvimos 11 meses de caída de las ventas y en esta tendencia se revirtió a partir de diciembre cuando se consolidó el programa ‘Ahora 12’”, dijo el secretario de la Came Vicente Lourenzo.
El repunte en el consumo, afirman los economistas, no significará por el momento un cambio de tendencia en la actividad industrial, que desde finales de 2013 está en caída según números oficiales y privados. “La dependencia de los indicadores industriales a los rubros que tienen que ver con exportaciones como el automotriz es muy fuerte, y por la situación en Brasil es difícil que ese sector levante, pero los sectores que se relacionan con el mercado interno como el alimenticio, van a despegar”, concluyó D’Attellis.
Según los últimos datos del mercado de futuros, el dólar sólo parecería una alternativa atractiva a largo plazo: mientras que para enero se negocia una divisa a $10,25, para junio de 2016 la moneda norteamericana se estima en los $11,74 y para diciembre de ese año, a $13,88.
Se desaceleró el crecimiento de los depósitos en pesos del sector privado
Durante mayo se recuperaron parcialmente los créditos mientras que, impulsados por el freno en la colocación de plazos fijos, los depósitos en pesos del sector privado moderaron su ritmo de expansión a 2,3% en mayo, luego de crecer por encima de 4% en meses anteriores. Esa fue la conclusión a la que arribó la Fundación Mediterránea en un informe publicado recientemente.
“Las tasas de interés pasivas reflejan una leve moderación a la baja, ubicándose en torno a 20,6% anual la de plazos fijos minoristas y 20,3% anual la correspondiente a mayoristas (Badlar)”. “En este contexto, los créditos al sector privado se aceleran, pasando de una variación de 1,3% intermensual en abril a 2,2% en mayo”, dijo el economista Joaquín Berro Madero del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana, perteneciente a la Fundación Mediterránea.
El especialista analizó que durante el mes de mayo, los créditos al sector privado en pesos recuperaron cierto dinamismo intermensual) luego del magro crecimiento registrado en abril.
Principalmente, el impulso vino dado por la expansión de las líneas comerciales; más específicamente, por las financiaciones mediante documentos: a sola firma, comprados y descontados. “Por su parte, los depósitos del sector privado -que venían creciendo a tasas superiores a 4% intermensual- en mayo registraron un incremento de 2,3%”, detalló. Atribuyó “este fenómeno” al “freno registrado en los depósitos a plazo fijo, que crecían 6% intermensual promedio desde que comenzó el año, y ahora solo se movieron 0,6%.
El Banco Central publicó, en su último Informe Macroeconómico, que el crecimiento de los plazos fijos minoristas, en términos interanuales, fue en mayo del 35,9%, en tanto los depósitos a plazo mayoristas han comenzado a aumentar fuertemente. El trabajo destaca que ese incremento de los depósitos minoristas se aceleró particularmente desde octubre pasado, mes desde el cual han aumentado más del 27%.
Por otra parte, continuó el reporte de la entidad reguladora, el crecimiento de los préstamos al sector privado continúa acelerándose y el total de las líneas crecieron interanualmente 25,2% destacándose tanto las líneas comerciales (los documentos crecieron 30,8%) como aquellas destinadas a las familias cuya tasa está regulada (tarjetas de crédito que crecieron 42,2% y personales que crecieron 27,3%).