Busca ahorrarse u$s 2000 millones de los u$s 5800 millones que deberá pagar en octubre. Podría activarse en caso que no salga el swap con Rusia. A la vez, el BCRA ya ha comenzado a hacer un pago anticipado de los Boden 2015 que cotizan en el mercado ofreciendo una paridad similar a la de octubre
El Gobierno se esmera por estas horas en mejorar su horizonte financiero. Urgido por compensar el alicaído nivel de las reservas, trabaja en dos frentes para blindar los ahorros en dólares que aún detenta. Por un lado, hace algunos días, requirió un listado completo de los tenedores de Boden 2015, es decir, se proveyó de una información clave y, en cierta manera, confidencial. En esta línea, altas fuentes del mercado sostienen que la búsqueda tiene un objetivo: lanzar un bono en dólares con vencimiento al año 2020 que pueda ser canjeado por el Boden 2015 que termina en octubre.
En rigor, no se trataría de un canje propiamente dicho, ya que hacerlo pondría en peligro la nueva emisión. Es que cualquier título ofrecido en lugar del Boden 2015 podría ser considerado «deuda externa» por el Juez Griesa, lo que lo haría susceptible de ser embargado. Por eso en la ingeniería financiera, estaría previsto ofrecer el título en el mercado doméstico.
Además, se estudia la emisión del bono a 2020 que podría suscribir aquél que, al momento del vencimiento del Boden 2015, prefiera conservar la tasa que paga el cupón, antes que los dólares que debe desembolsar el Tesoro. De esa forma, no se trataría de un canje y no obstante el Gobierno podría conservar unos u$s 2000 millones (lo que tienen los inversores locales, principalmente institucionales) de los u$s 5800 millones que debería desembolsar a comienzos de octubre. En esta línea, señalan además en la City que una parte importante de inversores se encuentra arbitrando: aquellos que tienen Boden 2015 eligen el Bonar X, cuyo vencimiento opera en 2017 o el Bonar 2024 que vence precisamente en 2024. Ambos pagan dólares.
Swap y pago anticipado
Otra de las apuestas del Banco Central, es la negociación de un nuevo swap de monedas con Rusia para reforzar las reservas de la entidad. A punto de agotarse el acuerdo por el equivalente a u$s 11.000 millones pactado el año pasado con China, gran parte del equipo financiero del Gobierno se encontraba el último viernes en Rusia con ese objetivo. Se trata de un paso relevante: en caso de no prosperar ?en definitiva el comercio con Rusia ronda los u$s 2500 millones anuales y el swap sería de u$s 4000 millones? el Gobierno tiene en carpeta la emisión del bono. Incluso hay quienes sostienen que podría ser utilizado aunque se firme el swap con los rusos. Por otro lado, el límite ?informal? que existe en este momento para relanzar un swap con China es que, en principio, no puede superar el 20% del total de las reservas. En el caso de la Argentina, los u$s 11.000 millones superan esa marca, por lo que un nuevo swap resulta de difícil concreción. En rigor, funcionarios del Banco Central (BCRA) viajaron a China en las últimas semanas con ese objetivo. Fuentes oficiales confirmaron los contactos aunque señalaron que se negoció un memorándum de entendimiento para que un banco del país asiático opere con yuanes en la Argentina. No hubo novedades de una posible ampliación del swap.
Pero hay más: en los últimos días, el Gobierno puso en marcha un esquema de ?seducción? para los tenedores de Boden 2015: a través de distintas entidades, intervino el mercado para plasmar una paridad en el bono que prácticamente resulta similar a los dólares que pagará en octubre. Es decir que el Gobierno se ofrece a comprar esos títulos en el mercado a un valor que, pasando los pesos al tipo de cambio de dólar MEP ($ 13,75, el viernes, en la bolsa), permite hacerse de los dólares en el acto. La diferencia sustancial es que el pago de estos títulos se hace, ahora, en pesos. Así, en los hechos, el BCRA ha instrumentado el «pago anticipado» del Boden y de esa forma ya se ha ahorrado hasta ahora unos u$s 150 millones. El viernes, el bono cotizó a $ 1428 por 102,35 (nominal), lo que arroja un dólar MEP incluso superior al de mercado.
«Aquél que tiene Boden, puede venderlo ahora que es prácticamente lo mismo a los dólares que pagará en octubre; claro que en lugar de pedírselos al Central, el inversor se hace de los pesos y puede comprar el dólar MEP en bolsa», sostienen en la City.
El Gobierno encara ahora 12 semanas hasta el fin del mandato presidencial de Cristina Kirchner. En la dinámica cotidiana, opera una salida de reservas a través de la ventanilla del llamado dólar ahorro, pero también por la venta de paquetes turísticos y pasajes aéreos en pesos que luego le demandan los dólares al BCRA. Todo ello se compensa con lo yuanes chinos, que permiten sostener las reservas en un nivel relativamente estable en torno a los u$s 33.000 millones.