La Argentina sigue atrayendo dólares en el mercado financiero apostando al inminente acuerdo con los holdouts con compras que demuestran que se está raspando el fondo de la olla. El riesgo-país bajó un 2,6% a 474 puntos. Ayer puntualmente se notó un punto de inflexión en los mercados internacionales que daría la sensación de que los fantasmas aparecidos en enero (China, petróleo, EE.UU.) desaparecerían. Las señales: el petróleo trepó un 8%, Goldman Sachs pronostica que puede ir a u$s 45 para fin de año, el dólar cayó contra el euro y los Bonos del Tesoro norteamericano llegaron a un techo en el rendimiento. Las acciones en Brasil subieron un 2,6%. Los bonos en default de la Argentina (y que comenzarían a ser pagados en caso de un acuerdo) en dos días. subieron el 30% El anuncio de un entendimiento con los bonistas italianos que se presentaron ante el CIADI tuvo su efecto. La mayoría de los papeles en default operados son los viejos Global 2008. En este sentido un informe interesante efectuado por AdCap destaca la tendencia positiva de estos papeles a la luz de los recientes anuncios efectuados por el Ministerio de Economía.
Coincide esta tendencia con la serie de visitas de bancos de inversión extranjeros al país con clientes para analizar el potencial de la suba de los papeles domésticos y de la economía en general. ¿Cuánto más pueden subir los títulos argentinos cuando se anuncie el acuerdo con los fondos buitre en Nueva York. Los títulos bajo ley argentina ya rinden sólo un 7,25% anual en dólares. Las apuestas que se están haciendo es que pasarían a rendir el 6,25%. La contracara del anuncio del acuerdo es que se viene un festival de bonos y no sólo del Gobierno nacional: provincias y empresas están agazapadas para emitir deuda en el exterior. Hasta en acciones hay emisiones en danza como las de Consultatio aumentando la oferta de papeles en la plaza. Puntualmente en el caso de los papeles que se emitan para pagar a los fondos buitre trascendió que habría cláusulas para que no los vendan inmediatamente en el mercado. Sería lo inverso al esquema acordado con Repsol al momento de compensar a la petrolera española con papeles por la expropiación de sus acciones en YPF. En esa ocasión, Repsol inmediatamente se desprendió de los Bonar X, Discount y Bonar 24 de la mano del JP Morgan. Se estipularía en el acuerdo con fondos buitre que deberán vender por año sólo el 20% de los títulos que reciben. Otra alternativa: que se pague con bonos sin cotización en los mercados. O bien un mix con ambos esquemas. El reciente «repo» por u$s 5.000 millones pactado por el BCRA con bancos extranjeros servirá para afrontar los pagos de los cupones adeudados por los Par y Descuento, y que fueran bloqueados por el juez Griesa.
Otro capítulo interesante es lo que sucede con los GDP Warrants o los cupones del PBI, que tienen subas del 13% en lo que va del año. La demanda de estos papeles se basó en la versión de que el Gobierno estaría analizando la posibilidad de recomprarlos en el mercado o bien efectuar una oferta de adquisición a sus tenedores. Alimentó esta versión las críticas que hiciera Alfonso Prat Gay al momento de su emisión en 2005 al entonces ministro Roberto Lavagna y al secretario de Finanzas Guillermo Nielsen. Cuando se efectuó el primer canje de la deuda en default, el mercado no valoraba la inclusión de los GDP Warrants en la oferta a acreedores. Traducido: la inclusión de esos papeles en la oferta no aumentaba la participación de inversores en la reestructuración de la deuda.
Por otra parte, la Argentina ya empieza a competir con otros países con inversores a los rendimientos actuales. No son pocos los que ya están mirando los títulos de Brasil, y puntualmente los de algunos bancos ofrecen retornos del 12% anual en dólares, casi el doble de los de Argentina. Los de Petrobras, cuyo futuro es un enigma ante los juicios abiertos en EE.UU., o los nuevos casos de corrupción que se puedan ir develando. Vueltas de la economía, Argentina enamora más que Brasil.
Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=826345