Si el escenario brasileño no empeora y el Gobierno impulsa el mercado interno, en junio podría comenzar a recuperarse. Hay 6900 industrias en alerta máxima por tarifas
La industria podría caer hasta 2,5% durante el primer semestre del año producto de la merma en la demanda, que ya venía en picada y ahora se acentúa por el ajuste, sumado al contexto negativo de Brasil, que el año pasado sufrió una caída del sector industrial del 9% y para 2016 se avecina un contexto similar.
Este fue el diagnóstico que esbozó el economista jefe de la UIA y director ejecutivo a cargo, Diego Coatz, en la primera reunión de comité ejecutivo de la entidad realizada ayer. El directivo de la institución se refirió al contexto actual y a la dinámica brasileña y consideró que durante el segundo semestre del año el escenario de caída podría comenzar a mejorar en función de cómo evolucione la economía vecina y el mercado interno. Si bien hasta ahora los sectores sensibles siguen protegidos, todavía sobrevuela en la central industrial el temor a una economía más abierta. Si ello no ocurre y se toman medidas para reanimar el mercado doméstico, la industria podría comenzar a recuperarse.
El capítulo Brasil mereció una exposición exclusiva, ya que se trata del principal socio comercial de la Argentina, donde se destina el 52% de las exportaciones, principalmente del sector automotriz y alimentación. Según aseguró Coatz a los empresarios, la relación del tipo de cambio con Brasil hoy, después de la devaluación de diciembre, es la misma que existía entre 1998 y 2001, a fines de la convertibilidad. No sólo inquieta la merma de las ventas a ese país, sino que los excedentes productivos brasileños se exporten a la Argentina y los productos nacionales no puedan competir.
El impacto de la suba de tarifas de luz en las industrias también fue otro eje relevante del encuentro. El responsable del área de infraestructura de la UIA, Alberto Calsiano, dio a conocer un detallado informe en el que reveló que existen 6900 industrias, pequeñas y medianas, que se encuentran en situación de alerta máxima por el aumento tarifario, que en algunos casos pueden ser de hasta 600%. Los sectores que utilizan la energía como principal insumo sufrirán más el incremento, pero el impacto es transversal a todos los sectores.
Con esta preocupación, equipos técnicos de la entidad comenzaron a mantener reuniones con funcionarios de distintas áreas del Gobierno con el fin de trabajar en cómo minimizar este efecto, precisaron fuentes de la UIA.
Varios directivos de la central fueron convocados por el Gobierno para ocupar cargos, por lo que el diálogo hoy es muy directo. El ex director ejecutivo, Martín Etchegoyen, es el secretario de Industria; Eduardo Bianco, su jefe de Gabinete; Sergio Drucaroff, subsecretario de Gestión Productiva; Cecilia Martín, directora del Mercosur de la secretaría de Comercio; Cecilia Hiriart, directora de Gestión Ambiental y Carolina Castro, subsecretaria Pyme.
En su informe, para explicar las causas del actual incremento tarifario, Calsiano también expuso la evolución que tuvieron los subsidios a la energía eléctrica en los últimos 10 años, que pasaron de $ 2000 millones en 2005 a $ 145.000 millones en 2015. Aun así, en la entidad creen que muchas pymes podrían llegar a desaparecer con los aumentos fijados.
Por otra parte, con la negociación de los salarios docentes como telón de fondo (ver pág. 2), los empresarios se mostraron preocupados por las paritarias, aunque todavía restan dos meses para comenzar a discutir. De todos modos, advierten que deben pactarse incrementos según la inflación futura y desean que se fije como pauta la del Gobierno, del orden del 25%. En voz baja, ninguno cree que ésa vaya a ser la inflación del año, con los impactos de la devaluación y el ajuste tarifario anunciado.
Al referirse a este flagelo, varios industriales se manifestaron molestos por ser acusados como los causantes de la suba de precios, «cuando es un problema que ya lleva cinco años de descontrol por razones macroeconómicas», enfatizó uno de los miembros del comité. También hubo quien planteó que el Gobierno se equivoca en no acentuar, en su estrategia comunicacional, que es un problema heredado.
Consultado por El Cronista, el presidente de la UIA, Adrián Kaufmann, consideró que «hoy lo importante es mantener la unidad de los empresarios y estar muy atentos a la situación de la industria». Además, consideró necesario dar apoyo al Gobierno y hacer todos los aportes posibles.