Seis privados también actuaron contra Argentina Clearing. Existen tres cautelares a favor de los demandantes en Rosario que suspendieron los recortes en los contratos de futuros y obligaron al mercado a depositar la diferencia retenida. También, una audiencia de mediación en Buenos Aires. Rofex pidió la revocatoria, y hay expectativa por la respuesta de los jueces
Después de las más de 200 cartas documento de inversores que respondió Rofex, prosperaron durante la feria judicial las acciones judiciales contra del Mercado a Término de Rosario y de Argentina Clearing para recuperar el recorte en los precios que se hizo en los contratos de futuros de dólar comprados después del 29 de septiembre pasado, cuando el Banco Central (BCRA) vendía futuros por debajo de las expectativas de devaluación que se cumplieron con el nuevo gobierno.
Según informaron Rofex y Argentina Clearing a CNV, ambas instituciones fueron notificadas de tres cautelares a favor de los demandantes durante la feria judicial de enero. Los beneficiados por los Juzgados Civil y Comercial 5 y 12 de Rosario son Diego Hernández (expediente 22/16), el operador de turismo Free Way (22/16) y la cerealera Molinos Benvenuto (35/16).
La semana pasada, además, fueron citados a tres audiencias de mediación para conocer las pretensiones de la empresa Farmográfica, la Asociación por la Defensa de Usuarios y Consumidores y Alberto Daniel Espósito por las causas por daños y perjuicios por incumplimientos de los contratos, pero en la ciudad de Buenos Aires.
Por medio de las cautelares, los jueces no sólo habilitaron la feria judicial para tratar estos casos, sino que también obligaron a Rofex y Argentina Clearing a liquidar los contratos en los términos pactados originalmente suspendiendo la comunicación 657 que declaraba la emergencia y corregía el precio original de los contratos adicionando $ 1,25 a los abiertos entre el 30 de septiembre y 27 de octubre y $ 1,75 para los abiertos desde el 28 de octubre. Ese dinero debía depositarse en el Banco Municipal de Rosario.
Rofex todavía no depositó ese dinero porque entre la última semana de enero y primera de febrero presentó recursos de revocatoria contra las tres cautelares, según explicaron fuentes de la entidad. Si las revocatorias prosperan, los demandantes deberán comenzar un juicio ordinario. Si no prosperan, la cámara de apelaciones determinará si las cautelares se suspenden o siguen adelante.
Los demandantes están muy a la expectativa de la respuesta de los jueces. Y Rofex y Argentina Clearing también: la corrección de los precios de los contratos redujo en unos $ 10 mil millones la deuda del BCRA, quien era en definitiva quien debía pagar los contratos. Pero como contraparte y cámara compensadora, a ambas instituciones no les alcanzaría el patrimonio para hacer frente siquiera a un 1% de ese monto.
Pero tras recibir más de 200 cartas documento que dejaban constancia de la disconformidad sobre el descuento en los contratos de futuro, el potencial de juicios es alto.
Según explicaron abogados que enviaron algunas de esas cartas, los juicios son largos y costosos y muchas empresas y particulares aún están evaluando si iniciar esos procesos.
Además, se considera relevante a la hora de argumentar si el dinero de los contratos fue cobrado y la razón por la que se demanda, ya que es más defendible un consumidor financiero, que depositó sus ahorros o necesita el dinero para un fin, que un especulador.
Se entiende que la cautelar de Free Way, por ejemplo, se otorgó porque la empresa compró en su momento los dólares a futuro con el dinero de los clientes que viajaban al exterior. Dado que el BCRA impedía las transferencias al extranjero, decidió resguardar el dinero comprando futuros hasta que poder pagar los servicios turísticos de los pasajeros.
«El objetivo es que prevalezca la justicia porque fue un privado, como Argentina Clearing o Rofex, el que tomó medidas arbitrarias para favorecer a un tercero. Si la medida la hubiera tomado el gobierno, era otra historia», explicó otro demandante.
La corrección tuvo que hacerse porque el Rofex permitió desde octubre al BCRA intervenir sin límite en el mercado de futuros de dólar, lo que hizo que las autoridades anteriores vendieran contratos por debajo de las expectativas de devaluación regalando cobertura cambiaria a cambio de generar una fuerte emisión monetaria.