Es una de las herramientas que estudian junto al Gobierno para reflotar el mercado. También discuten usar Unidades de Cuenta y crear una Comisión de vivienda
Con las ventas estancadas desde hace cinco años en niveles muy bajos, las inmobiliarias iniciaron una búsqueda de nuevas herramientas para reactivar el sector. Desde comienzo de año, las cámaras que agrupan a los martilleros mantienen reuniones con los principales organismos oficiales que sostendrían un nuevo sistema para mejorar el acceso al crédito, y finalmente activar las ventas.
Presentaron diferentes propuestas a representantes de la Anses, el Banco Central y el Instituto de la Vivienda, y aseguran que los mecanismos avanzan aunque en un contexto de alta inflación como el actual, no podrían todavía implementarse.
El impulso que tomaron los operadores inmobiliarios se da porque a pesar de que las ventas tuvieron un leve repunte desde comienzo de año, la cantidad de operaciones se encuentra en mínimos históricos.
En la Ciudad de Buenos Aires, las operaciones que se realizan actualmente representan el 50% de lo que fueron en años buenos como 2007 o 1998. Apenas se ubican por encima de los datos de 2001 o 2002, en plena crisis.
Los últimos datos del Colegio de Escribanos porteño muestran que en febrero se realizaron 1919 escrituras, solo un 23% más que las firmadas en febrero del 2002 (que fueron 1557).
Los datos de enero de este año también mostraron una leve mejoría del 10%, pero marcaron el tercer peor registro para ese mes desde 1998, apenas por encima del piso alcanzado en 2002, en coincidencia con el default y la salida de la convertibilidad.
El director de la inmobiliaria Bullrich, Roberto Ledo, explicó que el origen del leve repunte en las ventas que se observa desde comienzo de año se debe a las ventas que se hicieron en las construcciones de pozo iniciadas cerca de tres años atrás. «Se terminaron de construir las viviendas y se escrituraron. Como no hay financiamiento, la gente compra una vivienda en obra», señaló Ledo.
En el segmento residencial, indican los principales operadores del sector, este panorama de estancamiento se centra justamente en la falta de créditos hipotecarios. Según la última información del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, solo el 13% de los inmuebles se compra con hipotecas.
Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, aseguró que el clima es positivo para el mercado pero sobre todo en cuanto a consultas. Todavía la materialización del repunte en las ventas no se registra. Por eso, está esperanzado en los avances que se están dando en las reuniones que la Cámara mantiene con organismos oficiales.
En la última, surgió un nuevo tema: la posibilidad de que las inmobiliarias se constituyan como precalificadoras de créditos para acelerar los procesos de aprobación de los bancos. «Somos la primera persona con la que habla un potencial comprador de un inmueble, no deberíamos ser ajenos al proceso», asegura Bennazar.
Por otro lado, también avanza la idea de implementar el sistema de Unidad de Cuenta, atadas a determinadas variables y la idea en la Argentina es que esté vinculada a la evolución de los salarios. En los próximos días, se presentará también formalmente un proyecto para constituir una Comisión de vivienda público/privada para estudiar posibles resoluciones al déficit habitacional.
Mario Gómez, de la comisión directiva del Colegio inmobiliario Cucicba, fue parte de esas reuniones. Si bien coincide en que hay un panorama más alentador para el mercado, advierte que es necesario que haya un control de la inflación. Por eso, proyecta que cualquier herramienta nueva llegaría el año próximo.