Ahora el Gobierno emitirá deuda para pagar en efectivo lo que acordó con los holdouts. En el mercado calculan que la cifra podría alcanzar los u$s 15.000 millones
La Corte de Apelaciones de Nueva York ratificó ayer una orden judicial que le permitirá a la Argentina salir del default y volver a los mercados financieros internacionales luego de 15 años.
De esta forma, al Gobierno ahora le queda sólo cumplir con lo acordado en las últimas semanas con los holdouts que representan apenas el 7% del total de la deuda que en 2001 entró en default. Es decir, pagar en efectivo el total del capital adeudado y el 75% de los intereses, una cifra que se acerca a los u$s 11.000 millones, situación que lo obligará a emitir deuda por lo menos por un número similar, aunque en los mercados se sospecha que el número final podría alcanzar los u$s 15.000 millones y convertirse en la mayor emisión de deuda de un Estado en los últimos 20 años.
El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, consideró una decisión ?sin precedentes? al fallo, que fue en respuesta a una apelación presentada por los acreedores de la Argentina tras una audiencia de una hora y media.
La audiencia se hizo un día antes del vencimiento del plazo fijado entre la Argentina y los principales acreedores, los fondos buitre NML Capital y Aurelius, para pagarles u$s 4653 millones a cambio de cerrar las demandas judiciales.
Según reprodujeron agencias, a pesar de que se produjo contrarreloj, el abogado de NML, Matthew McGill, afirmó ante la Corte de Apelaciones que el preacuerdo con la Argentina seguirá en pie más allá del jueves (por hoy), porque ambas partes admitieron que el pago en 24 horas era imposible, y se concretará hacia fines de la semana próxima.
«No pensamos terminarlo mañana (por hoy), dijo, luego de que el abogado de la Argentina, Paul Clement, señalara que el país no sería capaz de «recaudar capitales en una noche».
El Gobierno ya alcanzó preacuerdos por unos u$s 8250 millones (el último fue por u$s 255 millones con el fondo Yellow Crane Holdings), y había pedido en una carta a la Corte de Apelaciones una rápida decisión.
Tras escuchar los argumentos de ocho partes involucradas, los jueces adoptaron la inusual decisión de expedirse en el momento tras un breve cuarto intermedio, según consignaron agencias internacionales.
Al mismo tiempo el fallo también provocará que el Banco Central quede provisoriamente con menos reservas (tiene u$s 29.442 millones y se le restarán alrededor de u$s 2500 millones), debido a que el gobierno de Cristina Kirchner había sumado a las mismas los depósitos de pago que había realizado en los últimos dos años pero que nunca llegaron a los acreedores que habían aceptado los canjes de deuda (2005 y 2010) porque los había frenado el juez Thomas Griesa, en un controvertido fallo a favor de los fondos buitre. Luego del fallo de la Cámara se espera que Griesa libere la prohibición y los acreedores de los canjes cobren los pagos acorralados en el BCRA.
Griesa había decidido el mes pasado que levantaría los embargos que pesan sobre la Argentina en caso que el país derogara las leyes Cerrojo y de Pago Soberano (exigencia ya cumplida), y pagara los acuerdos alcanzados con los fondos buitre.
Si bien en el mercado no se tomó como determinante, se cree que ayudó que ante la Corte de Apelaciones de Nueva York, la Argentina recibió el respaldo del gobierno de Estados Unidos a través de una presentación como ?Amicus Curiae? del fiscal federal del distrito sur de Manhattan, Preet Bharara.
En su escrito, Bharara señaló que no levantar el bloqueo de fondos para el pago a bonistas reestructurados, tendría «graves consecuencias para la economía argentina y los intereses de Estados Unidos en la región». Toda una posición, luego de la visita en marzo pasado del presidente de EE.UU. Barack Obama a la Argentina.