La compañía de mayor capitalización bursátil del mundo, Apple Inc., publicó el pasado 23 de abril sobre el cierre del mercado sus resultados correspondientes al segundo período fiscal de 2014 y su acción rápidamente comenzó a trepar en el after-market hasta superar máximos del año.
La publicación de Apple ha tenido dos focos que han sido muy bien recibido por los inversores. En primer lugar, ha logrado disipar (al menos temporalmente) dudas acerca de su crecimiento de ventas, especialmente de su producto líder, el iPhone. Según el comunicado oficial, Apple ha vendió 43,7 millones de iPhones, cuando el consenso de los analistas estimaba ventas menores a los 38 millones. Por el contrario, las ventas de iPads fueron menores a las estimadas.
Estas cifras de ventas han permitido a la compañía incrementar 4,6% sus ingresos hasta los 45,6 billones de dólares, superando las estimaciones promedio de 43,5 billones. En el mismo sentido, su beneficio creció 7,63% respecto de igual período de 2012 (11,62 dólares por acción vs previsiones de 10,19).
Pongamos en contexto algunas de estas cifras: Apple ha generado ingresos en sólo un trimestre por 45.600 millones de dólares. Esto equivale a 1,64 veces las reservas del Banco Central o a 1,02veces la base monetaria (si se toma un tipo de cambio de 8 pesos por dólar). Alguno podrá argumentar que las ventas no son flujos disponibles. Pues bien, tomemos entonces el flujo de caja operativo del trimestre: 13.500 millones de dólares. En poco más de dos trimestres ya se alcanzarían las reservas argentinas.
Téngase en cuenta que sólo estamos hablando de los resultados de un trimestre y de una sola compañía. Si tomásemos el efectivo actual de Apple de 150.600 millones de dólares con cualquier indicador macroeconómico argentino ya no conseguiríamos punto de comparación alguno.
El otro foco de la publicación de Apple ha sido su mayor preocupación por sus accionistas, algo muy criticado en el pasado principalmente por los multimillonarios Carl Icahn y David Einhorn. En concreto, Apple ha incrementado su programa de recompra de acciones en 30.000 millones de dólares hasta finales de 2015, llevándolo a un total de 90.000 millones. Además ha anunciado un incremento del 8% de su dividendo trimestral para llevarlo hasta 3,29 dólares por acción.
Ambas retribuciones a los accionistas serán parcialmente financiadas por una nueva emisión de deuda. Vale recordar que Apple acudió en mayo de 2013 por primera vez en 20 años a los mercados de deuda.
Por último, se ha anunciado un split de acciones de 7×1, es decir, cada accionista recibirá 6 nuevas acciones por cada acción que tenga en su poder el próximo 2 de junio (las acciones de Apple comenzará a cotizar ajustadas a partir del día 9 de junio). El split de acciones le daría más liquidez a sus papeles y permitiría a más accionistas minoritarios a acceder a su capital. Sin embargo, este no sería el primer split de acciones de Apple: en febrero de 2005 tuvo lugar un split de 2×1.
Ambos focos de la presentación de resultados han sido muy bien recibidos por el mercado: el día posterior las acciones treparon 8,20% y el viernes (día de estrepitosas caídas en las bolsas) subieron otro 0,73%.
De cara al futuro existen muchas razones para mantener una posición larga en Apple: su abultada caja, los amplios márgenes de sus productos, su market share, su diversificación geográfica, el valor de su marca, el continuo crecimiento de las ventas de iPhones, el impacto de su alianza con China Mobile (el mayor operador de telefonía a nivel mundial), el crecimiento de las ventas a través de sus tiendas virtuales y, principalmente, el continuo desarrollo de nuevos productos. En referencia a este último punto, el mercado espera ya con ansias el lanzamiento del iPhone 6 y un smartwatch. El CEO de Apple, Tim Cook, ha comentado al respecto: “Estamos impacientes por lanzar más productos nuevos que sólo Apple podría traer al mercado”.
En la actualidad el precio objetivo (target price) promedio de Apple según 46 analistas consultados por Yahoo Finance es de 614 dólares por acción. En comparación con el cierre del viernes, esto implicaría una suba del 7,35%.
Invertir en Apple, la compañía de mayor capitalización bursátil del mundo, está al alcance de todos los inversores argentinos. En el mercado local se pueden comprar acciones a través de CEDEARS. Esto implicaría tener expectativas positivas sobre dos drivers: el precio de la acción en el Nasdaq y el tipo de cambio implícito.
La posibilidad está.