Algunos movimientos muy interesantes tuvieron impacto directo en la cotización del dólar, en sus diversas variantes. Vamos a ver qué pasó por estos días.
Como es habitual, lo primero que tenemos para analizar son los gráficos que muestran de forma muy clara la evolución del tipo de cambio:
Lo primero que observamos con claridad es que el dólar blue está desde hace unos meses totalmente hermanado al dólar de convertibilidad. Recordemos que el dólar de convertibilidad no es otra cosa que el cálculo de la base monetaria sobre las reservas en dólares.
Pero…siempre hay un pero en esta historia, hay que tener en cuenta que este informe se basa en datos oficiales publicados por el BCRA. Los últimos disponibles corresponden al 30.09.2015. Y posterior a eso hubo un movimiento muy importante, el pago del BODEN 2015, que como no podía ser de otro modo, se realizó con reservas del BCRA.
Acá hacemos un paréntesis y hacemos una pregunta, que seguimos aclarando porque genera mucha confusión. A partir de este pago ¿Argentina se desendeudó? La respuesta es NO. Las reservas del BCRA no pertenecen al país, sino al BCRA. Si el pago lo hubiera hecho la Tesorería General de la Nación si hubiera cambiado el nivel de endeudamiento. En este caso, simplemente se cambió de acreedor: de los tenedores de BODEN 2015 se pasó al BCRA. Y si bien al BCRA es muy difícil que se le devuelvan los fondos tomados, no significa esto que técnicamente se haya reducido la deuda.
Esto implicó una caída muy grande de las reservas. Concretamente, el pago del BODEN 2015 se llevó USD 4.740 millones y sumado a un vencimiento provincial anterior a ese pago, la disminución de las reservas durante este mes de octubre fue de USD 5.500 millones. Mucho, muchísimo para un BCRA que está complicado.
Entonces, ¿el dólar de convertibilidad en cuanto quedó? Sufrió un incremento muy alto, para ubicarse por encima de $ 19,00. ¿Eso quiere decir que el dólar blue va a subir a ese valor? La respuesta es no por ahora. Pero es un valor que hay que tener en cuenta porque implica claramente que, con este nivel de emisión para cubrir el déficit, la escalada del dólar no va a frenar. Y mientras más se demore el sinceramiento de su valor, más complicado va a ser el ajuste sobre la economía. Tarde o temprano, ese ajuste llega.
Si hacemos una mirada rápida de las reservas, nos encontramos con al total informado por el BCRA hay que hacerle algunas correcciones para llegar a un valor más claro y lo podemos apreciar en el siguiente cuadro:
Después de los pagos del Bono de Buenos Aires y del BODEN 2015 todavía tenemos que ajustar por 3 items:
* Swap China: están computadas dentro de las reservas, pero su impacto en el mercado cambiario (si se necesitara) es extremadamente limitado.
* Encajes: también se computan como reservas, pero son encajes bancarios, correspondientes a particulares que tienen cuentas en dólares.
* Pago retenido: corresponde al pago de cupones con ley de Nueva York que retuvo el Juez Griesa, que siguen en un “limbo” dado que no llegaron a los acreedores.
Encontramos entonces un escenario muy complejo, dado que no hay una solución visible a este problema, al menos no con este rumbo económico. Está claro que nadie quiere traer dólares a 9,50 y mucho menos, a un país donde después no los pueden retirar. Al respecto podemos agregar un dato: el cepo se instauró para, en principio, evitar la salida de dólares (o disminuirla). Desde ese momento hasta acá, salieron USD 20.000 millones. Ese dato por si solo nos puede dar una idea de la magnitud del “éxito” de la medida.
Seguimos entonces con un claro déficit de dólares a lo cual sumamos la salida de dólar turista (cada vez más gente adelanta el pago de las vacaciones, descontando un ajuste en el tipo de cambio en breve) y las ventas de dólar ahorro.
El dólar ahorro es otra trampa que no tiene solución. Por un lado, permite el famoso “puré” que no es más que comprar dólar ahorro en el mercado oficial para venderlo en el blue. La ganancia casi instantánea en este caso es del orden del 35-40%.
Por el otro lado, si se restringe la venta de dólar ahorro, la brecha con el blue se vuelve a incrementar, porque habría menos oferta en este mercado. La realidad es que el deporte nacional es “sacarle” dólares baratos al BCRA por cualquier medio legal disponible.
¿Cuál fue la solución propuesta? Continuar con el modelo…de endeudamiento en este caso. Entonces se emitió el BONAR 2020. Pero no sirvió de mucho, dado que por este bono se estimaban compensar en parte lo pagado por el BODEN 2015. Sin embargo, el resultado fue muy distinto: se obtuvieron sólo USD 669 millones al 9,40% anual. Acá es interesante ver otro gráfico con las tasas que pagan los distintos países por colocaciones similares:
Es impactante ver este cuadro, porque queda claramente visible cómo el mercado valora las medidas económicas y la realidad de cada Gobierno. Vemos fácilmente que Argentina toma un crédito a 5 años al 9,40% anual mientras que México toma créditos a 100 años a 4% anual y Perú tomó hace menos de 2 meses un crédito a 12 años y por un monto de casi el doble que el nuestro, con una tasa de 4,125%. Por supuesto, hay que tener en cuenta que estamos comparando las condiciones de los créditos con “vecinos” y no con países más desarrollados, con los cuales las diferencia son por supuesto, más marcadas.
¿Qué podemos esperar?
De acuerdo a los mercados de futuros vemos 2 que muestran claramente que se descuenta una devaluación.
Por un lado el Mercado de Futuros de New York, donde se espera una suba del tipo de cambio en el primer mes del nuevo Gobierno del 10%, luego entre 4% y 5% hasta marzo, donde se estima otro 7%, quedando luego entre 1% y 3%, una vez alcanzada la devaluación de marzo. Recordemos que este marcado no está influenciado por las políticas del Gobierno.
Localmente, tenemos el ROFEX que indica devaluaciones de 2% hasta diciembre y entre 2% y 3% de ahí en adelante. Después de marzo 2016, las estimaciones superan incluso el 7%.
Los números del BCRA son cada vez peores y no aparecen en el horizonte ninguna opción para mejorarlos. Disminuir las reservas no es gratis y afecta claramente al tipo de cambio. La permanente salida de dólares le achica cada día más el margen de maniobra e intervención al BCRA.
Según un estudio del IARAF (Instituto Argentino de Análisis Financiero) al próximo gobierno le quedará una relación PBI / reservas que será la peor desde la hiperinflación de los 80.
Sin lugar a dudas las distorsiones serán ajustadas y en esto coinciden todos los equipos económicos. Las variantes van desde el gradualismo hasta el ajuste brusco. No obstante, aún en las opciones más benévolas de gradualismo, se entiende que al menos una parte del ajuste va a tener que producirse relativamente rápido.
Según parece, la llegada de la factura y el pago de la cena está cada día más cerca.