Continúa la intervención oficial en Lebac para aplacar expectativas de inflación. Esperan que suba la tasa de referencia o toque el piso del corredor
El Banco Central (BCRA) volvió a intervenir ayer en el mercado secundario de Lebac para llevar la tasa de las letras más cortas a 24,25%, en un intento por contener expectativas de inflación en alza. El salto en los rendimientos de las letras hizo que los bancos empiecen a desarmar pases para ir a Lebac, con lo cual en algunas mesas ya apuestan por una suba en la tasa de interés de referencia el martes próximo.
La tasa de la Lebac que vence este mes quedó ayer en 24,25%, la que vence el mes próximo 23,60% y la tercera más corta en 23,15%. Esto es más de 200 puntos básicos por encima del nivel que tenían en la última licitación mensual de esas letras y la suba se explican por una decisión del BCRA de retirar pesos del mercado para subir la tasa de interés de esos papeles.
Los hombres de Sturzenegger salen a vender letras a tasas crecientes para elevar su rendimiento y, de esa forma, atraen liquidez excedente en manos de los bancos. A lo largo de marzo, por estas intervenciones la autoridad monetaria aspiró $ 75.981 millones.
Analistas y operadores leen esta suba de tasa como un endurecimiento de la política monetaria con el objetivo de devolver a su cauce a las expectativas de inflación, aunque especulan con que el BCRA todavía no se animó a tocar su tasa de referencia, el centro del corredor de pases a 7 días que se mantiene desde principios de año sin cambios en el 24,75%.
«En un contexto en que las expectativas de inflación han subido, el BCRA debe subir la tasa de referencia. Por ahora no se animó», explicó ayer el Estudio Broda en su informe mensual. «El dilema del BCRA: subir la tasa de referencia para bajar la inflación o no subirla ante el temor de frustrar la recuperación», señaló la consultora de Miguel Ángel Broda.
El martes el propio BCRA tuvo que dar cuenta de que, por el repunte de los precios en febrero, marzo y este mes, las expectativas de inflación que refleja su mensual Relevamiento de Expectativas de Mercado se alejaron de la meta del 12% al 17% para este año por primera vez desde noviembre pasado. Pasó de 20,8% en marzo a 21,2%.
Por eso es que los operadores esperan que el BCRA deba tocar, y hacia arriba, la tasa de pases. Y a la intervención oficial en la tasa de Lebac como una señal de que tendrá que hacerlo.
«Teníamos una cartera de pases importante y la estamos migrando a Lebac por el diferencial de tasas», confiaron en un banco de primera línea. En otra entidad admitieron que todas las señales que da el BCRA llevan hacia esa dirección.
Los números monetarios todavía no muestran esa migración como masiva. Los pases fueron contractivos en $ 17.738 millones desde que el BCRA empezó a subir la tasa de Lebac.
Según explican en los bancos, el 24,75% de tasa de referencia es mucho menos que el 24,25% de la tasa de Lebac. Y esto es porque, para empezar, la tasa de referencia es el centro del corredor que arman los pases pasivos (en los que pueden colocar liquidez excedente) y los activos (el precio al que el BCRA presta liquidez). Los pases pasivos ragan una tasa nominal del 24% anual. Pero hay algo más: los bancos pagan Ingresos Brutos por los pases pasivos, lo que reduce su rendimiento efectivo al 22%.
Una alternativa que el BCRA contempla es achicar el corredor de pases, es decir, subir la tasa de los pases pasivos y bajar la de los activos sin elevar la tasa de referencia. El centro del corredor sería el mismo, aunque la política monetaria quedaría endurecida en los hechos.