Mientras el «Capitán Frío» Federico Sturzenegger sube la tasa de Lebac a más del 24%, los bancos tienen las tasas de plazo fijo al 17,50%, según el promedio total del sistema que da a conocer el BCRA.
¿Cómo se explica este desfasaje? Van por dos senderos distintos: mientras el titular del Banco Central no da el brazo a torcer (con la venia de Macri, lo que lo convierte en un virtual super ministro de Economía) y se empecina con cumplir su meta del 17% de inflación a costa de enfriar la economía, los bancos tienen tal abundancia de liquidez que no necesitan pagar más por las colocaciones. «Tenemos la tasa flat en 15% a 30 días, baja a 14,90% a 60 días y a 14% para 180 días», comentan en el Santander.
Los depósitos funcionan como un especie de amortiguador para los bancos: cuando carecen de liquidez intentan atraer la toma de estos depósitos y cuando tienen exceso intentan desalentarlos, como está sucediendo en la actualidad. «Los dos principales factores que afectan esta liquidez, la suba o baja de demanda de crédito y la suba o baja de depósitos a la vista, se encuentran con niveles bajos (principalmente mayoristas) en el primer caso, y relativamente altos en el segundo. Ante esta situación, los bancos claramente no tienen incentivos a tomar depósitos a plazo fijo», entiende Diego Guzmán, CEO de Megainver.
Otro factor que podría incentivar la suba de la tasa de interés es la toma de depósitos por parte de los bancos para luego invertirlos en Lebac, pero aquí surgen dos factores: «Por un lado, los bancos ya cuentan con una gran exposición en estas letras y, por otro, los inversores (incluso minoristas) compran estos instrumentos directamente y, por lo tanto, no constituyen un plazo fijo en su banco», explica Guzmán.
Por otra parte, hay un descalce entre la Lebac y la Badlar, que es la tasa de referencia para los plazo fijos y que se ubica en 19,31%. Además, en los bancos admiten que los préstamos a empresas en pesos vienen flojos, no están traccionando (¿qué incentivo hay a invertir con tasas tan altas?), con lo cual sólo necesitan liquidez para los personales, que sí vienen creciendo en las últimas semanas. Se habían frenado por el miedo a perder el empleo, pero ahora se reactivaron, ya sea para viajar o para hacer remodelaciones en el hogar.
El consejo para los tomadores de estos créditos es observar no sólo la TNA, sino el CFT, que es el costo financiero total, que llega al 49% sin impuestos y se va al 60% con impuestos, según detallan en uno de los bancos líderes. O sea, prácticamente tres veces más que la inflación prevista según el relevamiento de expectativas que hace el BCRA (21%). Aclaran que, para el caso de los prendarios, el CFT se reduce al 35%.
En uno de los grandes bancos extranjeros decidieron hacer una baja en la tasa de los personales, de modo que empiecen con un 3 adelante y no con un 4. «Mi bajada de tasas apunta a ganar market share, de modo de poner un tope a la tasa en el 39%, pero si el cliente tiene buena calificación crediticia puede bajar al 30% de TNA», advierte el gerente de Préstamos de Banca Minorista.
Claro que todo este escenario puede cambiar en 45 días, cuando se empiecen a conocer las encuestas que el mercado tome como probable para las elecciones de las PASO. En caso de que den al oficialismo como perdedor en la provincia de Buenos Aires, lo más probable sería una dolarización del portfolio y baja de tasas, a la par de un descenso en la inflación.
El dato
24,25% Fue la tasa a la que cortó la Lebac a 28 días ayer. Dicho rendimiento está en línea con lo que se venía operando en el mercado secundario para las letras con vencimiento en abril, en el que el Banco Central venía interviniendo desde hacía varias semanas. En comparación con la licitación del mes pasado, que había sido a
22,25% para el plazo de 35 días, la tasa tuvo un alza de 200 puntos básicos.