Ganó 29 centavos en la semana. Operadores ven probable un recorte a la tasa de política monetaria mañana. Rumores sobre el futuro de Sturzenegger también pesan
A la espera de la primera decisión de tasa de política monetaria tras la relajación de las metas de inflación que tendrá lugar mañana, el dólar subió 29 centavos en la primera semana del año para cerrar en $ 19,20 tras alternar ruedas con alzas de hasta 25 centavos y una baja de 18 centavos.
Los operadores cambiarios apuestan por una baja de la tasa de referencia, establecida desde noviembre pasado en 28,75%, que en caso de confirmarse llegaría sin ningún dato de inflación alentador que la motive. La debilidad del presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, tras la redefinición de las metas de inflación en la última semana de 2017 también mueve los ánimos.
En el mercado mayorista, mientras tanto, el dólar sumó 21 centavos en las cuatro primera ruedas del año y quedó en $ 18,89 para la venta, todavía debajo de su récord de $ 19,20 del 28 de diciembre pasado, día en que se anunció una relajación de las metas de inflación que fue acompañada por una baja de tasas en el mercado secundario de Lebac.
La interna económica -el cambio en las metas y la baja de tasas fue impuesta por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los ministros de Finanzas, Luis Caputo, y de Hacienda, Nicolás Dujovne- disparó hasta rumores de renuncia de Sturzenegger que impulsaron aún más a la divisa.
«La debilidad del pesos es una mezcla entre un rumor de renuncia del presidente del Banco Central y la incertidumbre alrededor de la decisión de política monetaria del martes», dijo Alejo Costa, estratega de BTG Pactual a la agencia Bloomberg.
El ruido político divorció a la suerte del peso de la del resto de las monedas latinoamericanas, con las que suele moverse bastante a la par desde la eliminación del cepo cambiario. Es la única moneda de la región que retrocede frente al dólar en lo poco que va del año.
Mientras que el peso colombiano ganó 2,7% en el período, el peso mexicano subió 2,5%, el real brasileño 2,4%, el peso chileno 1,6% y el sol peruano 0,8%. A contramano, el peso argentino se depreció 1,38% en las cuatro ruedas de la semana pasada.
«No está claro qué esperar de la decisión del martes, nosotros esperamos un recorte de 150 puntos básicos a la tasa» de referencia, dijeron en la mesa de un banco. «Pero no es una decisión cómoda para Sturzenegger, porque por más que le hayan relajado las metas las expectativas de inflación están por encima incluso de las nuevas metas», agregaron (ver pág.2)
Las metas de inflación fijadas en enero de 2016 apuntaban a un 25% de inflación para ese año (fue casi 40% y el BCRA prácticamente no la tomó como referencia), entre 12% y 17% para 2017 (superó el 24%), del 10% para este año y del 5% para 2019. Esos parámetros fueron elevados a 15% para este año, 10% para 2019 y el 5% retrasado a 2020.
Las expectativas de inflación implícitas en activos se dispararon de inmediato (ver pág.3) y los cálculos de economistas también. El Banco Santander hizo pública la suba de su previsión de suba del nivel general de precios para 2018 al 17,5% desde el 16% previo, como resultado de la relajación de la política monetaria.