El dólar oficial casi no se mueve, las cotizaciones paralelas caen, así como los futuros de dólar, pero los inversores siguen buscando cobertura ante una posible devaluación: en los primeros dos días del título dollar-linked del gobierno en el mercado, subió 2,7%.
El gobierno colocó el Bonad 16 a $ 849,15 el jueves pasado. El lunes el bono estuvo casi todo el día por debajo del precio de salida pero pegó un salto a $ 862 (+1,51%) al cierre y ayer estuvo más volátil para cerrar a $ 872 (+1,16%).
En los primeros días de cotización en el mercado secundario, se espera que el precio del bono se reacomode. Sobre todo porque el gobierno llamó a todos los tipos de inversores -aseguradoras, bancos, fondos comunes de inversión (FCI) y corporaciones para pedirles que participen de la negociación. Ahora se ve el interés genuino en el título.
El rendimiento del AO16 (0,46%) está asociado al comportamiento del tipo de cambio de contado y a la devaluación esperada. El primero está estable y la segunda cae, por lo que resulta contradictorio que el bono soberano suba su cotización.
"Desde que cambiaron las autoridades del Banco Central, el gobierno adoptó la política de contener cualquier tipo de cambio: oficial, blue y contado con liquidación. Algunos inversores se fueron de estos activos, pero otros se quedan igual porque, si hay una devaluación no prevista, están cubiertos", dijeron en un FCI.
La preferencia por los dollar-linked es más llamativa, porque las tasas en pesos (como un fondo a un 23% a seis meses y Lebac a un 27% a 3 meses) superan la tasa de devaluación esperada (19% a enero próximo).
Y porque quien apostó al dólar en el último mes sólo contabilizó pérdidas: "El Central usa el tipo de cambio como ancla inflacionaria y la curva de futuros bajó porque no se espera que en los próximos meses se devalúe mucho. Tener un bono como inversión de corto plazo no parece atractivo. Esa cosa argentina de tener dólares y estar seguro es una cobertura que ha salido carísima en los últimos meses", dijeron en un banco.
En el fondo agregaron: "Aunque la tasa en pesos esté por arriba de la tasa esperada de devaluación, mucha gente prefiere tener este tipo de activos dollar-linked, aunque pierda unos puntos. Porque con esos papeles en la cartera está cubierto del riesgo de evento".
Esta expectativa se observa con un volumen pequeño (2% de la emisión de $8.350 millones). Pero por ahora parece leer que la caída de reservas internacionales, la baja liquidación de exportaciones y la deuda con los holdouts hacen prever que el riesgo de un evento devaluatorio está latente.