El Gobierno se abocó a alternativas para regular la tasa de interés, ante el fuerte aumento del costo del dinero en los últimos meses. El análisis involucra al sistema financiero, pero también otras fuentes de financiamiento, como la vinculada a cooperativas de crédito y mutuales, que también ofrecen préstamos al público y especialmente a las pymes.
Según averiguó este diario, desde Casa Rosada ya le pidieron al Ministerio de Economía y al Banco Central distintas opciones que permitan avanzar con la regulación de tasas. Incluso, fuentes relacionada con la entidad que preside Juan Carlos Fábrega, reconocieron que "se está analizando el spread que aplican los bancos", es decir el diferencial entre la tasa de depósitos y la que se aplica a los distintos créditos. Cualquier regulación es delicada, sobre todo en un momento en el que el crédito se encuentra estancado. Si la regulación de tasas es demasiado estricta, la retracción crediticia podría ser mucho peor que la actual.
Las tasas de interés se regulan desde hace mucho tiempo, en distintos segmentos. Por ejemplo, el crédito con descuento de nómina para jubilados tiene topes máximos hace dos años, por iniciativa de la ANSES. Aquella decisión frenó la especulación que se hacía con los jubilados, cuando se trataba de créditos que no tenían prácticamente riesgo de incobrabilidad, ya que la mutual cobraba antes de que se acredite el haber jubilatorio. Además, está vigente la línea de financiamiento productivo, por la cual los bancos deben prestar a tasas del 17,5% a las pymes.
También hay topes para lo que los bancos pueden cobrar para financiar el saldo de la tarjeta de crédito (es un porcentaje relacionado con la tasa de préstamos personales), mientras que también hay límites para las tasas de las tarjetas extrabancarias.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, habló en las últimas jornadas de tasas "usuarias", y dejó entrever los pasos que se vienen, al advertir que "si no hay autorregulación, va a ser el Estado quien se ocupe de regular". En los últimos días trascendió que algunos préstamos personales con tasas del 100%, aunque en realidad ese nivel corresponde al Costo Financiero Total (CFT), es decir la tasa más gastos varios y seguros que cobran las entidades por el otorgamiento.
Desde los bancos aclaran que no se trata de abusos, sino que el alza de tasas obedece a una decisión adoptada por el Banco Central en enero, que por otra parte fue bienvenida por el sistema. El incremento de tasas fue clave para absorber pesos vía Lebac y Nobac, detener la corrida cambiaria y ponerle un piso a las reservas, que en abril incluso recuperaron u$s 1.200 millones.
El problema es que la restricción crediticia acentúa la caída de la actividad económica, afectada por el aumento de la inflación y la caída del salario real. El Central definió ayer una nueva reducción de tasas en la licitación de Lebac, pero a cuentagotas: de la suba de 1.400 puntos básicos de enero (pasó del 15% al 29% anual), hasta ahora sólo bajó 200 puntos.
Fuente: http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=739727