Las entidades privadas creen que la autoridad monetaria estuvo tímida estos días y no dio señales de renovación. Esa venta quitaría presión cambiaria
El dólar vivió ayer otra jornada de nerviosismo que hizo que el tipo de cambio subiera por séptima jornada consecutiva en el segmento mayorista a 43,87 pesos y alcanzara otro récord. Pero se acercan los últimos días del mes, que habitualmente agregan aún mayor volatilidad por el vencimiento de los contratos de futuro de dólar. En el mercado hay expectativa sobre la actitud del Banco Central (BCRA): si renovará los contratos de futuro que tiene vendidos y que vencen este viernes. Si no se renuevan, pueden generar más presión cambiaria.
Según coincidieron los bancos consultados, el BCRA tiene una herramienta a mano que no sólo podría contener la volatilidad del tipo de cambio, que pone tan nerviosa a la sociedad, sino que hasta podría bajar el precio con una acción contundente, como incrementar la cantidad de contratos a futuro.
Las entidades esperan que el BCRA por lo menos renueve sus posiciones, que estiman entre USD 1.000 millones y 1.500 millones, para evitar que esos contratos a futuro que se vencen no se vayan a comprar divisas en el mercado de contado generando una suba adicional del tipo de cambio.
Pero se busca que la entidad monetaria además compre contratos adicionales de futuro para contener el tipo de cambio. Se entiende que cuando entren los dólares genuinos de la cosecha, podrá recomprar esos contratos a un precio menor.
«Hay expectativa de qué hará el Banco Central con los contratos de futuros que vencen a fin de mes. Si va a renovar con plazos más largos. Tiene capacidad. Si tenés contratos de futuro comprados y el BCRA no te vende genera más demanda en el contado. Es importante que el BCRA esté claramente ofertando futuros, sino generará una situación más compleja», explicó un banquero.
«Lo más probable es que renueve, porque no va a echar más leña al fuego a la situación actual, que es compleja», agregó.
Este banco espera que el BCRA vaya a fondo y abra contratos adicionales, por otros USD 1.000 millones o hasta el total que permite el FMI. «Tiene poder de fuego para hacerlo en el caso de que las cosas se compliquen más. Se está esperando que vaya al máximo», explicó el banquero.
Si el BCRA abre más contratos, le da la posibilidad al exportador que tiene divisas de venderlas, invertir en pesos a tasas de mercado y comprar un futuro a tasas más bajas y ganar la diferencia.
«Es una herramienta que el BCRA puede usar a fondo», coincidió otro banquero. «El BCRA no hizo rollover de los contratos en estos días. Está siendo tímido. Lo que vence a fin de mes lo puede vender a abril o mayo», dijo este operador, que entiende que además pueden colaborar vendiendo al contado los bancos y organismos oficiales para contener el dólar.
«El mercado está tomador. Al renovar los futuros le das liquidez para que no se ponga nervioso. Y baja la volatilidad», agregó.
Esta expectativa se inscribe en un mercado que sufre la falta de herramientas de intervención que tiene el BCRA en un contexto de falta de oferta de divisas mientras espera la liquidación de los dólares de la cosecha y de los que venderá el Tesoro en sus licitaciones diarias.
«La tasa de interés, por más alta que sea, no lograría responder a la velocidad de los movimientos del tipo de cambio. Aún restan 10 jornadas para que el Tesoro comience a ofrecer USD 60 millones diarios y empiece el período estacionalmente fuerte de liquidación de divisas. Mientras tanto, la sensación de que el Ejecutivo tiene las manos atadas y la incertidumbre política son las que marcan el ritmo», dijo un informe de Delphos Investment.
«Es difícil pensar en que la calma llegue al mercado cambiario antes que la oferta de divisas. Esto se ha reflejado en una fuerte suba de los costos de cobertura de corto plazo, tal como exhibe la suba de las tasas implícitas Rofex en la última semana. La participación del BCRA en el mercado de futuros también se encuentra restringida, con un stock máximo de 2.700 contratos en marzo permitido por el acuerdo con el FMI» agregó la consultora, que indicó que en la última semana la tasa implícita subió a 54,1% desde 44% anual.
En Rofex, los futuros de dólar a fin de abril están $45,9. A diciembre, 59,70 pesos.