La perspectiva del tipo de cambio estable despertó el interés por instrumentos que no requieren un monto mínimo y permiten aprovechar las ventajas de un cóctel de productos.
La calma del dólar hizo que las alternativas de inversión en pesos se destacaran en enero y la perspectiva de un tipo de cambio estable en el corto plazo despertó el interés del público por los instrumentos que van desde el plazo fijo tradicional hasta opciones más sofisticadas, como las Letras del Tesoro (Letes), las Letras Capitalizables (Lecap), Bonos ajustables por CER (Boncer) y otros papeles privados de renta fija, como Obligaciones Negociables (ON) y Fideicomisos Financieros (FF).
Para obtener rendimientos financieros interesantes no necesariamente hay que convertirse en un experto. Ahí es donde sobresale la opción de los Fondos Comunes de Inversión, que permiten invertir sin un monto mínimo establecido y aprovechar de manera simple, las ventajas de un cóctel sofisticado de productos públicos y privados.
En enero los FCI más conservadores dejaron rendimientos de hasta 5,29% mensual, como el caso del Galileo Ahorro, que superaron incluso a los Fondos de riesgo 2, como el de Consultatio, que dejó 5,12% o el MAF Pesos Plus de Mariva, segundo en el mes con un rendimiento de 5,05%.
La diferencia entre ambos está en la composición de las carteras. El detalle completo para cada Fondo se puede ver en la página web de la Cámara Argentina de Fondos Comunes de Inversión, donde figuran la administradora, la depositaria, la composición de las carteras y los rendimientos que han obtenido. Pero, básicamente, en el caso del primero, las inversiones se distribuyen 21% en plazo fijos de diferentes bancos; 38% en títulos de deuda en pesos (Lecap, Lecer, Bonar 19) que incluyen ON de empresas y bancos, y 43% en títulos de inversión colectiva, que son mayormente los FF.
El segundo grupo incluye también en sus carteras plazo fijos (20%) y títulos de deuda en pesos, públicos y privados (55%), como fue el caso del FCI que mejor rendimiento logró el mes pasado. O una apertura que incluye 23% de opciones a plazo, 44% en títulos de deuda argentina, y 33% en vehículos de inversión colectiva.
Una de las ventajas de un FCI respecto de las colocaciones individuales, es que permite obtener tasas de interés más altas, cuando se trata de un plazo fijo. Los inversores institucionales, como los Fondos, son los que generalmente constituyen depósitos de 20 millones de pesos o más, cuya tasa (TM20) es tres puntos superior a la que se ofrece al público (46% contra 43%).
Otro atractivo, es la posibilidad de invertir en letras y títulos públicos, nacionales o provinciales sin tener que contar con un monto mínimo ni tener que analizar en detalle cada especie, lo cual se hace más específico en el caso de las participaciones en ON o FF.
Alcances
Los casos analizados corresponden todos a FCI con horizontes de corto plazo, y cuyo objetivo es el de obtener un rendimiento superior al de la tasa Badlar, que al 31 de enero era de 44,56% anual.
El podio de enero, de acuerdo a las variaciones de las cuotas parte, se completa en los FCI del primer grupo con el Ahorro Pesos de FBA (4,83%), seguido a centésimas por el Ahorro Pesos de Arpenta (4,81%). Y para el grupo 2, con el HF Pesos Plus (4,83%) en la tercera posición.
Hay centenares de Fondos con las más diversas opciones de riesgo, horizonte de inversión y combinaciones de productos que permiten al público en general la diversificación de sus carteras y potenciar el rendimiento de su capital.
Fuente: https://www.ambito.com/atraen-los-fondos-pesos-ganaron-53-enero-n5014015