Sería la primera reducción en 14 meses, ya que desde noviembre de 2016 que no sucede. El tipo de cambio, pendiente de la resolución de política monetaria
Aunque un punto más o menos de tasa de interés no significará un cambio sustancial para la economía argentina, se generó en el mercado una gran expectativa por la decisión que debe tomar el Comité de Política Monetaria del Banco Central. Se supone que el incremento de las metas de inflación hasta el 15% que anunció el Gobierno a fin de año tendría que permitir un relajamiento de la tasas de interés y así lo dio a entender el titular del BCRA, Federico Sturzenegger, durante la conferencia de prensa que se realizó en el Ministerio de Hacienda el 28 de diciembre.
Por lo pronto, el dólar operó desde aquel entonces con tendencia alcista. Ayer volvió a ajustarse y cerró en el mercado minorista por encima de $19,30 para la venta. La expectativa de una política monetaria más flexible y por ende menores tasas de interés impactó en forma directa en el precio del dólar, que es justamente uno de los objetivos buscados por el Gobierno, subió por cuarta rueda consecutiva.
Sin embargo, ahora la última palabra la tendrá el Banco Central. ¿Qué puede suceder con el «corredor de pases» que es la tasa que fija la entidad para el plazo de siete días? Actualmente se ubica en 28,75% anual y se abren, al menos, tres escenarios para monitorear, con sus respectivos impactos, el tipo de cambio y los reacomodamientos políticos:
- Reducción menor a 1 punto porcentual: La probabilidad de que la disminución sea casi «testimonial» es de 20%. La tasa quedaría en alrededor de 28% o incluso un poco más arriba. Claramente no es lo que espera el mercado, de acuerdo a la evolución de los rendimientos de Lebac en el mercado secundario. También podría ser leído como una señal de dureza por parte de Federico Sturzenegger ante las presiones de la Casa Rosada. En los últimos días, sin embargo, se especuló con una reducción de tasas poco significativa por parte del BCRA ante el elevado nivel de inflación de diciembre por los aumentos tarifarios. Una decisión de estas características impactaría en una rebaja del dólar. Además la inflación «núcleo» también habría tenido un ajuste alcista. Esto evidencia que se complicaría cumplir con la meta del 15% anual que estableció el Gobierno para 2018.
- Disminución de entre 1 y 2 puntos porcentuales: Este escenario tiene una probabilidad del 70%. Una baja de 200 puntos básicos dejaría la tasa de corto plazo por debajo del 27% y quedaría un rendimiento muy parecido al que hoy muestran las Lebac más cortas. El dólar está ahora alienado con esta opción, por lo que cabría esperar que la divisa se mantenga en los actuales niveles.
- Reducción superior a 2 puntos porcentuales: Es la opción menos probable de las tres, con un 10% de posibilidad de ocurrencia. Sería leído como una sobrerreacción del BCRA y podría impulsar al dólar por encima de los $20, algo que ni la Casa Rosada ni la autoridad monetaria desean en este momento. Las tasas bajarían a niveles cercanos a 26%. Considerando que la inflación sigue alta y que las expectativas se ubican muy por encima de la meta, no habría espacio para mayor agresividad.