Sturzenegger disertó ante la Cámara de Exportadores. Dijo no estar satisfecho con la inflación de julio ni con los datos del último trimestre. Insistió en que busca que la inflación ronde el 1% mensual a fin de año.
El presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, ratificó ayer que mantendrán el sesgo contractivo de la política monetaria e, incluso, están dispuestos a intensificarlo de ser necesario. La autoridad monetaria subió la tasa de referencia 150 puntos básicos a 26,25% en abril pasado, al tiempo que elevó los rendimientos de las tasas Lebac más de 400 puntos básicos al 26,50%, y las mantiene estables desde entonces. La inflación mensual mostró mejoras en mayo y junio, pero el dato de julio «no satisface» a la autoridad monetaria según dijo ayer su presidente.
Sturzenegger disertó ayer en la Cámara de Exportadores en el marco del Día de la Exportación 2017 donde dijo que la inflación está en baja y remarcó que eso sucede sin apelar a fijar al dólar en el mercado cambiario. «Estamos bajando la inflación sin apelar a un ancla cambiaria, sin esa ancla cambiaria que muchas veces se intentó en el pasado y que tantos dolores de cabeza le ha traído a nuestro país», dijo.
«El 1,4% y 1,2% de inflación mensual en mayo y junio volvieron a dar indicios alentadores, llevando la inflación interanual a 21,7%, la menor en siete años. Julio por otra parte mostró una suba de 1,7%. Y aunque la interanual siguió cayendo para llegar al 21,4%, es un número que no deja satisfecho al BCRA. Tampoco nos satisface el que la inflación de los últimos tres meses haya retornado en términos anualizados a un valor cercano al 18%», dijo Sturzenegger.
«Por ello, hacia adelante, el BCRA persistirá en su posición restrictiva, y la intensificará de ser necesario, para llegar a fin de año a niveles cercanos al 1% mensual, valor requerido para encaminar el proceso de manera consistente con la meta del año que viene, centrada en una inflación de 10% anual», agregó.
El último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) con el que el BCRA mide las previsiones de medio centenar de especialistas y participantes del sector financiero mostraba a principios de este mes que la mayoría de los encuestados esperan que el BCRA inicie recién en septiembre un sendero gradual de reducción de la tasa de política monetaria el centro del corredor de pases a 7 días, hasta un valor de 23,80% para fin de año.
Sin embargo, en la licitación de Lebac del miércoles pasado las subas de tasa en las letras de más largo plazo permitieron a operadores especular con una baja de la tasa de Lebac en los próximos meses. Desde enero pasado esas letras dejaron de sostener sobre sus hombros la tasa de referencia de la política monetaria, pero hacen buena parte del trabajo grueso.
El titular del BCRA defendió también la política de flotación cambiaria, con intervenciones en «momentos en que el mercado presente condiciones de liquidez que generen movimientos disruptivos de la paridad cambiaria». La entidad hizo ventas por más de u$s 1800 millones de reservas que se hicieron en las últimas semanas antes de las primarias del fin de semana pasado, cuando el dólar amenazaba con irse bien arriba de los $ 18.
En ese sentido, dijo que el Tipo de Cambio Real Multilateral (TCRM) que mide el valor real del peso en comparación con las monedas de otros países, es decir «la competitividad» cambiaria se encuentra un 23% más alto que el vigente antes de la eliminación del cepo, algo que indica una mejora en términos de competitividad.
«Y lo que es muy pero muy importante destacar, a la luz de la experiencia histórica argentina, es que hoy el tipo de cambio real se ubica en un valor prácticamente igual al que tenía en la misma época el año pasado (para ser exactos, 1,7% más bajo), pero con una inflación que se redujo a la mitad en el interín», dijo, como argumento en favor de que no se necesita dejar quieto al dólar para reducir la velocidad a la que avanzan los precios.