Bitcoin perdió más del 30% de su valor desde que alcanzó su máximo histórico. Para los analistas, la situación actual es similar a la de mayo y aseguraron que aún falta tiempo para ver una recuperación de la principal criptomoneda del mercado.
Bitcoin cierra la semana con fuertes pérdidas semanales y cotiza por debajo de los u$s50.000. Pese a que en las últimas 24hs se mantiene en suba por encima del 2% no le alcanza para impulsarse y se mantiene en una zona incómoda para los inversores. Por el lado de Ethereum, la segunda criptomoneda con mayor capitalización de mercado, la suba es menor al 1% y cotiza levemente por encima de los u$s4000. El mercado de las criptomonedas se mantiene con mayoría de subas lideradas por Cardano hasta un 5% y la gran sorpresa, Terra, baja 3% luego de una semana con fuerte impulso alcista.
Las bajas en el mercado de las criptomonedas, que atrapó al Bitcoin y las altcoins, fue el tema dominante en una semana en que se han ido desvaneciendo las esperanzas de nuevos máximos en 2021 para los principales tokens digitales.
«Los últimos días no han sido extremadamente positivos, ya que el mercado de criptomonedas experimentó otra caída general, parecida a la de mayo», comentó Alejandro Zala, country manager de Bitpanda en España, que ha sido la tercera mayor caída del Bitcoin en 2021. «Los temores sobre la propagación de la variante Omicron de Covid-19 echaron más leña al fuego, mientras que las posiciones sobre apalancadas aumentan la volatilidad y acabaron con la mayoría de las posiciones en el mercado en cuestión de horas», explica.
«Existen similitudes con el desplome del mercado en mayo», insistió Zala, cuando el Bitcoin perdió cerca del 50% y otras altcoins le siguieron en la caída. Entonces, el mercado rebotó rápidamente desde los mínimos y recuperó la mayor parte de las pérdidas en menos de tres meses. Al igual que en la reciente caída, las posiciones sobreapalancadas aumentaron la volatilidad y acabaron con la mayoría de las posiciones largas. «El mercado necesita algo de tiempo para recuperarse en estas situaciones y los gráficos intradía siguen siendo volátiles, pero en el marco temporal superior sigue siendo alcista» agregó el experto.
En general este ha sido un buen año para el mercado de criptodivisas. La adopción de Wall Street de este tipo de activos; los enormes estímulos monetarios de la Reserva Federal de EEUU (Fed) junto con otros bancos centrales, que han impulsado las inversiones; la atención de reguladores y empresas, que demuestran que el sector está siendo tomado en serio, todo ayudó para aumentar el interés en el bitcoin y otros tokens digitales catapultándolos en notoriedad y precios jamás vistos.
Pero pese a que el Bitcoin se llegó a revalorizar más del 100% en 2021 y Ethereum, alrededor de un 540% y alcanzaron hitos históricos en u$s69.000 y u$S4.800 dólares, respectivamente, los participantes de este mercado esperaban más. En concreto, el objetivo sigue siendo los u$s100.000 para la reina de las criptomonedas y los u$s5.000 para el token número dos por capitalización de mercado.
Pero las recientes oleadas correctivas, en especial la del 4 de diciembre que deprimió el bitcoin hasta u$s42.000 al borrar el 20% de su valor, han provocado que los analistas deserten del pronóstico de un bitcoin en u$s70.000 u u$s80.000 antes de final de año. Mientras hasta hace poco la mayoría de las voces clamaban por otra carrera alcista antes del 31 de diciembre, ahora, el consenso de mercado señala un final de año en los valores actuales, con los u$s53.000 como tope para las subidas.
«El Bitcoin mantiene su impulso alcista a largo plazo, pero todo en el corto plazo parece bajista», indica Edward Moya, analista de mercado de Oanda. «El bitcoin tendrá que superar las crecientes expectativas de un dólar más fuerte, una temporada extendida de ‘altcoins’ y la tendencia bajista a corto plazo para los activos de riesgo, ya que Ómicron descarrila el impulso de la reapertura tras la pandemia”, agrega.
Nadie tiene una bola de cristal para saber qué pasará con el bitcoin en el próximo mes, «pero una cosa es cierta: las últimas dos semanas nos han ayudado a descartar la idea de que el bitcoin es un activo seguro y que es una cobertura contra la inflación», comenta Ipek Ozkardeskaya, analista de Swissquote.
Con todo, las llamadas a la cautela se multiplican a toda velocidad. Sin ir más lejos, una encuesta de Natixis entre 500 inversores institucionales de varios países -entre los cuales, cuatro bancos centrales, más de 20 fondos soberanos y más de 150 planes de pensiones corporativos-, indica que tras el auge de esta clase de inversiones tras el último año, son el «principal candidato» para una «corrección importante» en 2022.
«Lo que se espera en la dinámica del Bitcoin es un largo invierno antes del próximo halving -un momento fundamental en la vida del bitcoin que ocurre más o menos cada 4 años- previsto para 2024», declara por su parte Emanuele Giusto Kantfish, autor del libro ‘Crypto Jungla: el Low Cost Llega a las Finanzas’. «No está todavía claro si ha empezado ya o viviremos un último ‘bull run’ hacia los esperados u$s80.000 -u$s100.000, vaticinados durante todo el 2021», afirmó, para puntualizar que la tendencia alcista del bitcoin todavía, según los inversores y traders, «se mantiene en el gráfico semanal, mientras la corrección actual debería cerrar su ciclo en las próximas semanas».