El plan del gobierno para hacer frente a la demanda de dólares sale a la calle y los desarrolladores aguardan que los primeros CEDINES les toquen la puerta.
Guarderías náuticas, inversiones agrarias, ganaderas, propiedades fraccionales para vacaciones, oficinas, hoteles, cocheras, son algunas de las opciones que se suman a los tradicionales departamentos o lotes para colocar los Certificados de Depósito para la Inversión (CEDIN).
"Nosotros los vamos a aceptar. Nos parece un vehiculo bien pensado para reactivar a la industria de la construcción", afirmó Rodrigo Fernández Prieto, director de Fernández Prieto & Asociados.
Las diferentes opciones no convencionales requieren una inversión que va desde los $ 40.000 (proyectos de forestación), hasta los $ 800.000 (hoteles), pasando por $ 200.000 (cocheras) o $ 85.000 (guarderías náuticas). Así, este tipo de desarrollos se suman a la tradicional comercialización de lotes y departamentos que podrán adquirirse en CEDINES.
Con rentabilidades que oscilan entre el 5% y el 20%, de acuerdo con el tipo de desarrollo, los constructores ofrecen la posibilidad de financiar fideicomisos con este nuevo instrumento ya que ellos, a su vez, pueden comprar materiales de construcción.
"Podemos aplicar los CEDINES en materiales de construcción, así que vamos a aceptar este instrumento", dijo por su parte Martín Dapelo, director de la desarrolladora Cuesa."Eso sí, hay que ver a qué precio los tomarán las constructoras: si es a dólar oficial, celeste o blue", vaticinó.
Cabe destacar que la comunicación "A" 5447 del Banco Central define que los destinos admitidos para validar el CEDIN son: compra de terrenos, lotes o parcelas -urbanas o rurales-, galpones, locales, oficinas, cocheras y viviendas ya construidas o la construcción de nuevas viviendas o la refacción, ampliación y mejora de inmuebles o adquisición de materiales para la construcción cuando se trate de una refacción, ampliación o mejora. A esos efectos, se deberá presentar ante la entidad financiera en el momento de la operación la documentación respaldatoria.
Para los grandes desarrolladores se trata de una oportunidad de integrar grandes capitales de dinero y aguardan inversiones que ronden entre u$s 100.000 y u$s 1.000.000.
Así, algunos jugadores ya ofrecen directamente emprendimientos en CEDINES. "Comercializamos un condominio con valores de entre 100 mil y 250 mil CEDINES porque confiamos rotundamente en este instrumento", afirmó Fernández Prieto.
"Pensar que una ley que salió desde el Congreso genere dudas es irrisorio", recalcó el directivo en respuesta a los más escépticos y agregó: "el Gobierno siempre ha honrado las deudas. Creemos que va a funcionar muy bien".
Sin embargo, diferente es el caso de los desarrolladores más pequeños que mantienen dudas respecto de si sus proveedores de materiales para construcción tomarán los certificados y a qué valor. "Todavía tengo que chequear si mis proveedores los tomarán y cómo se validarán", afirmó un desarrollador inmobiliario.
"Se podría evaluar pagar la tierra en esa moneda en tanto los dueños del campo lo acepten" sostuvo una compañía que realiza inversiones agrarias, inmobiliarias, y vacacionales, en la misma línea.
Lo cierto es que entre los más pequeños aún reinan las dudas sobre el valor de los CEDINES y su validación para cambiarlos por dólares.
"Que arranque otro. Que vea como es el procedimiento y después vemos", dijo descreído otro desarrollador agrario. Por ese motivo, la mayoría de los jugadores chicos prefieren "esperar a ver que pasa".
Diferentes opciones de inversiones no convencionales
Los fideicomisos no convencionales pueden resultar interesantes tanto para los pequeños como para los grandes inversores. Las diferentes opciones requieren una inversión que va desde los $ 40.000 (proyectos de forestación), hasta los $ 800.000 (hoteles), pasando por $ 200.000 (cocheras) o $ 85.000 (guarderías náuticas).
En la mayoría de los casos los desarrolladores (además de los CEDINES) aceptan pesos, ajustan con el índice de la Construcción del Indec y, algunos en particular, ofrecen financiación a tasa fija.
Las cocheras ofrecen una rentabilidad de entre el 5% y el 7% después del primer año. Se trata de la construcción de unidades con la posibilidad de que, luego de entrega, el fiduciante pueda utilizarlo de manera particular o adherir a un fideicomiso de explotación de un garage comercial.
"La ganancia mensual del fideicomiso se distribuye en forma proporcional entre todos los propietarios, sin importar la ocupación específica de cada cochera", expresó Alberto Súcari, director de la firma Ecocheras.
Otro fideicomiso no convencional es el de las camas náuticas. Con cierto auge en los últimos tiempos, este tipo de desarrollo se comercializa a partir de los $ 85.000 y ofrece una rentabilidad de entre el 15% y el 20% anual.
"Se presenta como un centro integral náutico con servicios como clases de navegación, seguros de embarcaciones, deportes acuáticos, excursiones guiadas, Wi-Fi, arreglos de las lanchas, servicio de motores, limpieza de lanchas y auxilio mecánico y remolque", explicó Martín Dapelo.
Por último, en lo que respecta a agro, las posibilidades abarcan los fideicomisos para forestación, ganadería o pooles de siembra, entre otros. En este tipo de casos, los inversores acceden a la propiedad de una fracción de tierra sobre la que se realiza siembra, producción forestal o la cría de ganado.
La rentabilidad varía de acuerdo al tipo de emprendimiento, características y ubicación, pero diferentes desarrolladores llevan a cabo este tipo de fideicomisos en pesos y evalúan la posibilidad de aceptar CEDINES.
Para descansar
Finalmente, otra de las opciones en fideicomisos no tradicionales es la de la propiedad fraccional para vacaciones.
Se trata de la adquisición de un porcentaje de una propiedad y el derecho a usarla durante un tiempo preestablecido. Jurídicamente es un derecho real que además puede registrarse mediante escritura pública. Suele utilizarse para alojamientos ubicados en complejos turísticos de lujo.
A la propiedad fraccional se la define como una inversión inmobiliaria racional porque evita pagar por tiempos que no serán utilizados por el propietario.
"Si bien por ahora es una modalidad poco difundida y desarrollada en el país, en otras partes del mundo los fractionals, aquellos inmuebles vacacionales de alta gama que se venden entre dos o más propietarios, ganan cada vez más terreno en la preferencia de los segmentos de altos ingresos", explicó una empresa especializada en este tipo de desarrollos.